Armando Salas Martínez

“Mi hijo Armando se me apareció en casa con dos boletos para Miami, diciéndome que ya que hablaba tanto de mis antiguos amigos Scouts de Cuba, quería formalizar la oportunidad de reunirme con ellos. Su hermana vendría a casa para compartir ciento por ciento con su madre y viajando el viernes 18 estaríamos  almorzando en familia en San José el domingo 20, y así mi querido y antiguo amigo Demetrio nos tiene aquí ansiosos de reunirnos con ustedes”.

Con estas palabras familiares damos inicio a la visita a Miami el sábado de Armando Salas Martínez, quien fuera Comisionado Nacional de Adiestramiento de los Boy Scouts de Gilwell en Cuba, y también un discípulo y sucesor en gran parte del inolvidable Salvador Fernández Beltrán, a quien LIBRE  promete próximamente rendirle homenaje, al matancero hijo de Fructuoso Fernández, quien se convirtió en brújula del Escultismo mundial.

Hablar con Armando Salas Martínez es revivir vivencias históricas, sobre  todo esta vez en compañía de su hijo querido quien hoy participa en uno de los programas más grandes de aguas potables y adherentes en América Central y dispuesto a tratar con las potables y no potables.

Salas Martínez padre recuerda los instantes de Hitler en Alemania y la decisión de no usar metales, hierros o similares para vías  de plomería, cuando eran imprescindibles para tanques, cañones y armamentos para la opresión, lo cual conduce al empleo de las tuberías PVC, en búsqueda de un sustituto resistente, campo en el cual los Martínez padre e hijo han adquirido vasta experiencia.

Trasladándonos a la isla cautiva nos remontamos a la Asamblea Nacional en la Universidad Martha Abreu, de  Santa Clara, en 1961 cuando ambos presentes nos opusimos a esa incautación comunista de la Asociación de Scouts” de Cuba, a través del llamado “Movimiento de Recuperación Scout, al que se opuso la “Operación Verdad Scout”.

Al mediodía los distinguidos visitantes fueron recibidos en la Pequeña Habana por un grupo de antiguos Scouts cubanos.

Esto prueba la vigencia, permanencia y razón del Escultismo cubano libre, iniciado en Cuba en 1914, y oficializado como Asociación de Scouts de Cuba el 1º de julio de 1927 con reconocimiento internacional, hasta septiembre de 1961 que fue incautado por la tiranía comunista, con 10,000 miembros inscriptos y su gran parte escapando de la persecución comunista, aunque ya desconocido por los organismos internacionales.

Un movimiento limpio, con las “altas y bajas” que alentaban los elementos comunistas en desafío a los principios del General inglés  Baden-Powell.

El resto es historia. Así crearon las condiciones para dividir, fragmentar y destruir a la sociedad y familia cubana, para destruir después todas las estructuras nacionales disociadora de la estructura cubana, como lo hacen en los demás países a los que se asoman con sus mismos propósitos secuaces.

Orgullosos Armando Salas Martínez, de contarte entre nosotros, de poder exhibir una familia de credenciales impecables en unión de tu esposa Isabel “Chabela”, de contar con unos sucesores y de saber que tus años de retos y experiencias te autorizan a seguir creando y dirigiendo huellas que perduran.

En Miami, Armando, te queremos y admiramos.