Con gran tristeza, pero profunda admiración por una vida vivida con entusiasmo y propósito, anunciamos el fallecimiento de Lázaro Ramón Asencio, hijo de nuestros coterráneos y grandes amigos de esta casa, Lidia y Lázaro Asencio. Q.E.P.D. 

La presencia carismática de Lázaro Ramón y su determinación inquebrantable dejaron una huella indeleble en todos los que tuvieron la suerte de conocerlo.

Lázaro Ramón Asencio, conocido tanto por su encanto como por su tenacidad, poseía una personalidad magnética que le granjeaba el cariño de todos aquellos con los que se cruzaba. 

En el seno de su familia, Lázaro Ramón encontró sus mayores alegrías y profundas conexiones. Le sobreviven su amada esposa, Olga Asencio, su querida hija Mónica Asencio, sus hijos Julio Morales y Christopher Morales, y sus adorados nietos Abby y Aiden Morales. 

Su vínculo con Aiden fue extraordinario, ya que compartieron una amistad única llena de aventuras compartidas, escapadas masticando chicle y hazañas traviesas que serán atesoradas para toda la vida.

Lázaro Ramón vivió su vida con curiosidad y asombro, buscando siempre la belleza en cada momento y la calidez en cada abrazo. Su amor no conocía límites, y su naturaleza afectuosa tocaba los corazones de todos los que tenían el privilegio de conocerlo.

Aunque se haya despedido de este mundo, Lázaro Ramón Asencio deja un legado de amor, risas y compasión inquebrantable que continuará inspirando y elevando a aquellos que tuvieron la suerte de haber sido tocados por su presencia. 

Al honrar su memoria, llevemos adelante su espíritu de resiliencia, bondad y alegría, sabiendo que sigue vivo en las innumerables vidas que ha tocado y en los corazones que ha calentado para siempre.