José Arenal, director del periódico “YA”, no dudó un solo momento en advertir que José Martí abrió caminos fuertes y fundamentales para asentar la libertad en Cuba en momentos en que los gobiernos opresores foráneos pretendían imponer su poder en el mundo y en la isla.

 “Martí, quien escribía en una veintena de periódicos importantes en América Latina, hizo a través de sus escritos un llamado al mundo libre y a reconocidos líderes de la comunidad internacional para que apoyaran su lucha para buscar que en la isla no hubiera ni dictaduras ni opresores”, afirmó Arenal.

“Y lo más importante del apóstol cubano fue que ese llamado hizo eco alrededor de prestantes luchadores del mundo en pro de la democracia quienes le dieron su absoluto respaldo y estuvieron ligados por la democracia y la libertad en la isla”, reiteró en la gala de navidad del CNP.

“El pensamiento de José Martí nos ayudó, a confrontar las crisis mundiales de aquella época. Sus ideas sobre la solidaridad abarcaron en sus escritos desde el individuo hasta toda la humanidad”, reiteró Arenal.

“Para Martí, la base de la solidaridad humana se ubicó en el individuo que respeta y quiere dar al otro individuo. Se manifestó en la ética martiana de que cualquier injusticia en cualquier parte del mundo sufre él mismo”, dijo Arenal al referirse a los escritos de Martí en periódicos y revistas de la época.

“Por eso, Martí reiteró que «El patriotismo no es más que amor» y la «Patria es humanidad». De ahí vino la idea de identificar la solidaridad con la unidad política, tan importante en el pensamiento de Martí y también de Simón Bolívar”, expresó.

“Sus escritos siempre se basaron en la unidad no solamente de las fuerzas cubanas opuestas al dominio español y a la política anexionista de los Estados Unidos, sino también de las fuerzas independistas en toda la región, como en Puerto Rico, junto con Cuba “, agregó.

“Por eso el Partido Revolucionario Cubano (PRC) que Martí fundó incluía a todos los pueblos libres. Es decir, sin unidad nacional e internacional, no era posible un cambio revolucionario y el cumplimiento de la idea «patria es humanidad», sintetizó.

“Fue una solidaridad mundial. El ideario de Martí—reflejado en todos sus escritos– se dispersó por todo el mundo libre. Por ejemplo, abogó por las clases obreras y los inmigrantes en Estados Unidos, igual a los que hoy sufren en toda la frontera”, afirmó por su parte Luis Conte Agüero.

“Defendió a los mártires de Chicago, fuente del Día Internacional de Los Trabajadores, cada primero de mayo. Apoyó las luchas de los negros, o sean los ex esclavos, nuevamente oprimidos por las leyes Jim Crow de segregación y por la sobreexplotación económica”, resaltó Conte Agüero.

“También Martí reconoció la importancia de los pueblos originarios, diciendo que sin ellos sería imposible la liberación de «Nuestra América.» Creó el concepto «Nuestra América» para unificar las naciones de América Latina y el Caribe frente a poderes externos”, insistió. 

Conte Agüero, máxima autoridad del partido ortodoxo en Estados Unidos, aseguró que Martí reconoció también la necesidad que había de concretar la solidaridad con otras naciones y sus pueblos, incluyendo Estados Unidos”, a través de sus comentarios y colaboraciones en el mundo periodístico.

“En diciembre de 1894 escribió en Patria, el periódico revolucionario que fundó en 1892: «Después de este hermanamiento de las naciones latinas, y sólo después de esto, podríamos aspirar a una unión fraternal con la otra América, la del Norte”, sintetizó Conte Agüero.

“Martí, como periodista, creía en la importancia de una «batalla de ideas», hoy en día fuertemente abogada por líderes de Nuestra América. Como dijo Martí: «una idea correcta desde una cueva en el fondo del océano es más poderosa que mil acorazados»”, trajo a colación Conte Agüero. 

“Hoy por hoy la solidaridad martiana de «patria es humanidad «caracteriza a un creciente número de países de «Nuestra América» y movimientos sociales del mundo. Por eso es evidente que se puede aprender mucho del pensamiento y praxis de José Martí”, recalcó.

“Cada individuo puede aprender y practicar la solidaridad – humildemente y con amor, respetando y dando al otro – desde el nivel individual hasta el nivel internacionalista. Cuanto más se unieran los movimientos sociales compuestos de tales individuos, mayor sería el desafío y el chance de liberar a la humanidad y proteger la Pachamama. Eso proclamó Martí”, concluyó.