Mi experiencia al trabajar con niños autistas en la clase ha sido de mucho aprendizaje, ya que son niños que tienen que adquirir habilidades sociales y de comunicación por lo que se hace imprescindible conocer cuáles son sus intereses para poder incorporarlos en el proceso de enseñanza. 

Esto se puede hacer a través de diferentes actividades sensoriales tales como pintar con los dedos, hacer pequeños proyectos utilizando plastilina y diferentes texturas como arena, sal, semillas, siempre bajo la supervisión del adulto. 

Todo esto además de ayudar al desarrollo de la motricidad fina y a la coordinación mano-ojo implementa la habilidad de comunicación con su entorno. 

También puedo decir que son niños que necesitan de las rutinas y que al interactuar con ellos la comunicación tiene que ser clara y directa, además del vínculo con la familia que hace mejorar la relación afectiva. 

Es de gran importancia que estos niños conozcan un espacio seguro dentro de la clase donde puedan tener tiempo libre para reenfocarse.

Al prepararme para trabajar con ellos puedo contribuir a su autonomía como individuos en el futuro.

Odalys Broche

Miami, Fl.