“Yo he dedicado mi vida a proteger a todos los niños inmigrantes, que de una u otra forma, están en este país pese a haber perdido a sus padres, quienes fueron deportados a sus países de origen”, dijo con profunda tristeza Nora Sandigo.

Sandigo, quien regenta una organización para ayudar a estos pequeños, ha tenido que convertirse en una “madre sustituta” de cientos de ellos, quienes tuvieron que permanecer en este país sin sus padres en refugios mantenidos por esta líder humanitaria de origen nicaragüense.

Tanto en el Día de Acción de Gracias, como en las festividades de Navidad, Sandigo organiza reuniones para festejar estas fechas tan tradicionales, ya que estos pequeños no tienen a nadie en esta nación ya que se quedaron prácticamente huérfanos.

Pero la tarea de Sandigo va mucho más allá porque ella también busca la manera de que estos pequeños vayan a la escuela y se capaciten, incluso, algunos ya son profesionales y ayudan con la organización que regenta Nora en Miami.

“No ha sido una tarea fácil. Estos pequeños tienen muchos traumas sicológicos, por la falta de sus padres, y aquí en mi asociación les brindamos cariño y amor, como si estuvieran en sus hogares de origen”, relató Nora.

“Por eso en esta fecha tan significativa de Acción de Gracias, con mis voluntarios, les preparamos una cena y festejamos todos rodeados de amor y cariño”, afirmó Nora, quien tiene un albergue en el vecindario de Homestead donde permanecen la mayoría de los niños.