Al desfile, del pasado-reciente Doce de Octubre, según el protocolo, tenía que estar en la tribuna esperando para recibir a los Reyes, con el respeto que merecen (aunque él los odia). No lo hizo, pero cuando apareció, en el Paseo de la Castellana, se extendió estruendosamente una lluvia de gritos de todos los “colores”: “Fuera…”, “Pero vete ya”. “Sánchez, no te queremos”, “Presidente corrupto”, “Déjanos en paz, sinvergüenza”, “¡Traidor!”, “¡Dimisión”, etc.

El nefasto presidente por accidente Pedro Sánchez, está travesando una etapa en la que no sabe dónde meter su cara de hipócrita y farsante. ¿Por qué? Porque allí donde aparezca el cielo parece derrumbarse por el pitorreo y los calificativos peyorativos que le grita la gente. Tanto es el desprecio y el odio que la mayoría de los españoles le tiene que, algunos medios han publicado que ha decidido no aparecer más en actos públicos, al menos, que sea demasiado imprescindible.

Le llueven críticas y acusaciones de todas partes. Su actitud delictiva y la de todos los que forman su desgobierno, les ha derrumbado la poca moral si alguna vez la tuvo. Está como “el chino en la fiesta, que no sabe si irse o defecarse en los pantalones”. Desde que irrumpió la putrefacta democracia, tras el fallecimiento de Franco (que sí los tenía bien puestos), España se ha ido al garete. Al ¿presidente?, le están cayendo denuncias a “tutiplén”. Y es que, desde que “asaltó” el Palacio de la Moncloa, se le han subido los humos llegando a pensar que es el dios omnipotente. Tiene el vicio de usar el avión presidencial “Falcon” (que existe para los viajes normales que exige cualquier gobierno digno y con vergüenza) hasta para ir al baño. Recientemente lo utilizó con la ¿mujer?, y el resto de la familia y parte de su séquito para asistir al Festival Internacional de Benicássin, y, en la misma semana para viajar a La Rioja para estar en la boda de un cuñado, ambos sitios están al canto de un gallo de Madrid, pero, a él, como todos los que se creen el “el rey del tibiritabara”, y dueño de España, hace lo que le salga de sus entretelas, violando todo tipo de protocolo. ¡Y así le va! Los abucheos no solamente se lo hacen a él, sino a todos los que en su desgobierno tienen cargos reverentes. Todos huelen a caca de mono.

DE TODOS LOS COLORES

El pasado-reciente 12 de octubre, por fin se celebró en Madrid, como Dios manda, y siempre se había hecho, gracias a la Presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso que, desde que asumió al cargo, no ha perdido tiempo en poner los puntos sobre las “íes”, el  desfile en honor al Día de la Fiesta Nacional, esa fecha que tanto odian los dictadores bananeros y la plaga de langostas “progre”, comunista, de los Estados Unidos que tanto les divierte derrumbar los monumentos a aquellos hombres que nos descubrieron, bajándonos de la mata de mango, nos cortaron el rabo y nos enseñaron a hablar. ¡Qué blasfemia no agradecer lo que se considera por los grandes historiadores, uno de los acontecimientos más extraordinario de la humanidad!

A dicho desfile, según el protocolo, Pedro Sánchez tenía que estar en la tribuna esperando que llegaran los Reyes para recibirlos con el gesto y el respeto que merecen (aunque él los odia). No lo hizo, sino cinco minutos antes que los monarcas. No hizo nada más que aparecer, en el Paseo de la Castellana y, estruendosamente, se escucharon gritos de todos los “colores”: “Fuera…”, “Pedro vete ya”, “Sánchez, no te queremos”, “Presidente corrupto”, “Déjanos en paz, sinvergüenza”, “¡Traidor!”, “¡Dimisión”, etc.  Dichas protestas se extendieron por todo lo ancho y largo del Paseo como la pólvora. Contrario a la llegada de los Reyes que fue un recibiendo apoteósico, y a los que le gritaron “¡Vivan los Reyes”, “¡Viva España!”, etc.

Y es que, como todo comunista, Pedro Sánchez desde que apareció en la presidencia, no ha hecho otra cosa que imponer una serie de leyes que conducen aún más a la destrucción del sistema…, de la economía, al mayor desastre, el cual esperamos que, si el “bayú” que representa la pestilentes Comunidad Europea, lo llamen a contar, ya que le debe a ésta una millonada de millones de euros. Aunque no lo creo, pues todos son “astillas del mismo palo”. “La ley del embudo”. 

Una de las más fuertes tropelías que acaba de hacer, es subir la luz eléctrica, alcanzando hoy el precio de 195 euros el KWH (kilovatio) por hora. Los sátrapas del Partido “Unidas Podemos”, fundado y controlado (aunque ya no toma parte en el desgobierno) Pablo Iglesia, está proponiendo intervenir las compañías eléctricas; de ocurrir, nos veremos igual que Cuba, Venezuela, etc., padeciendo apagones durante horas, causando el descongelamiento de los refrigerados y volviendo a congelarse los alimentos, razón por las que en Cuba y demás países bananeros, donde imperan los satánicos comunistas, la gente enfermará padeciendo diarrea y todo tipo de bacteria hasta provocarle la muerte a muchos. ¡Qué Dios nos coja confesado! Aunque la gente de derecha tenemos puesta nuestra fe en el Partido Vox, compuesto por hombres y mujeres de derecha con el valor suficiente para coger el mapa de España y ponerlo en el sitio del que lo extirparon sus enemigos adoradores de la Hoz y el Martillo.

Sánchez y su banda, han empeñado al país que, tendrán que pasar muchos años para pagar la deuda que han adquirido, dinero que han destinado a crearles puestos innecesarios a todos sus familiares y amigos, lo mismo que en Cuba, Venezuela y la pestilente Nicaragua. Donde sus dinastías poseen todos los derechos a vivir como emperadores, mientras los pueblos se mueren de hambre y por falta de medicina. No han creado ni una ley que sea favorable para la ciudadanía. Practican “la ley del embullo”, por eso y miles de falsedades más, es que allí donde vayan, Sánchez y sus pandilleros, son recibidos con los calificativos más insultantes que existen en nuestra maravillosa lengua. 

Para colmo, en varios medios de comunicación, sobre todo en las redes, se está publicando que su esposa Begoña es un transexual, y que la llaman “Begoño”. Y es que el padre de dicha “señora”, es propietario, desde hace décadas, de la cadena de saunas más grande y cara para homosexuales en toda España, y que fue en la que está ubicada en la calle San Bernardo (Madrid) donde Sánchez la-lo conoció. También se ha publicado que nadie, jamás, ha visto una foto del día de su boda.

Pedro Sánchez: Es la humillación personificada.