El próximo día 24 de diciembre se celebrará la Navidad. Con el inicio de la celebración, el árbol gigantesco de la Iglesia Católica comenzó a echar sus raíces,  teniendo como base sólida, nuestro verdadero Dios, que como una sábana blanca,  se tendió sobre la sábana negra, que ensombrecía el absurdo e idólatra paganismo, religión estatal del inmenso Imperio Romano.

La tristeza de la infernal pandemia que sacude el mundo, no podrá de ninguna manera, hacer que nuestros corazones no vibren de alegría -para recordar y celebrar el nacimiento del niño Jesús. La Navidad no -deja de ser un tiempo oportuno, para hacer una revisión de nuestro comportamiento, nuestras actitudes y consecuencias para recordar enseñanzas adquiridas, y hacer votos de perdón, con verdadero amor al prójimo.

Preparémonos todos, espiritualmente, para un futuro de gloria que verdaderamente vibre para exaltar a Nuestro Señor Jesucristo. Tratemos por todos los medios, de reunirnos en familia, porque la Navidad es bello motivo de regocijo y tiempo para meditar pedir a Dios y recibir bendiciones. Unámonos y llevemos a su máximo esplendor, con todas sus tradiciones,  el nacimiento del niño Jesús, que por nuestra salvación, a los treinta y tres años fue crucificado.

¡ Qué Dios nos bendiga a todos, fortaleciendo nuestra fe y nuestra perseverancia en sentirnos siempre, dignos de él!.

Permitan, en estas Navidades,  que se desborden sus riachuelos de emoción y felicidad, al cantar la más sentida y emocionante de las canciones católicas: Noche de Paz.

¡ Noche de paz, noche de amor!,

todo duerme en derredor,

entre los astros que esparcen su luz,

bella, anunciando al niñito Jesús.

Brilla la estrella de paz,

brilla la estrella de paz.

¡Noche de paz, noche de amor!

Oye humilde al fiel pastor,

Coros celestes que anuncian salud,

gracias y glorias en gran plenitud

por nuestro buen Redentor.

¡Noche de paz, noche de amor!

Ved qué bello resplandor

luce en el rostro el niñito Jesús,

en el pesebre, del mundo la luz,

Astro de eterno fulgor.

Astro de eterno fulgor.

Eladio Tito Peña Trujillo

Miami, Fl.