MÉXICO REAFIRMA SU DEMOCRACIA

Written by Adalberto Sardiñas

16 de junio de 2021

El pasado domingo, en sorprendente volumen, los mexicanos acudieron a las urnas para elegir alcaldes, concejales, gobernadores y la totalidad de la Cámara de Representantes, y buena porción de senadores, en unos comicios de medio término que impusieron un nuevo récord de votación. Como es costumbre en nuestra historia política hispana, hubo de todo. Pre, y mediante las elecciones, hubo violencia y varios candidatos estatales fueron asesinados. Pero en su contexto general, y descontando las cosas tan comunes en esta clase de eventos, debido, en primer lugar, a nuestra fogosidad temperamental, y en segundo, por la pasión e interés en proteger, a toda costa, intereses particulares, a veces no muy claros, las elecciones fueron normales y hasta con cierto tono de debatible civilidad.

En el número de congresistas triunfantes, parece que el Partido Morena, formado y liderado por López Obrador, va logrando una apreciable mayoría, no absoluta, pero suficiente como para aumentarle el poder a un presidente que tiene las ambiciones propias de un populista, con ilusiones socialistas.

AMLO parece añorar aquellos años de las décadas de los 60, 70 y 80, en que el PRI, partido al que entonces pertenecía, instauró lo que el    escritor peruano, Mario Vargas Llosa, llamó la dictadura perfecta. El PRI siempre era el ganador. Todos los presidentes pertenecían al PRI. Es      más, existía el procedimiento conocido como “el dedazo”, por el cual el liderazgo de ese partido, con la bendición final del presidente en oficio, señalaban al próximo candidato, que resultaba ser, indefectiblemente, el próximo presidente. Andrés Manuel, nunca fue el afortunado, y harto de frustraciones, se separó del PRI, buscando mejores pastos en la creación de su propio partido. Así llegamos a la creación de Morena, que, hecho a su medida, bajo una plataforma enteramente populista, atrapó la simpatía del sentir callejero, y de los sectores más desposeídos del país, que lo elevaron a la presidencia en una impresionante avalancha electoral.

  Pero previo al triunfo de López Obrador, México había saltado, ¡al fin!, de la dictadura perfecta, con su “dedazo” y la continuidad eterna de la presidencia del PRI, a la democracia, que, aunque en su forma embrionaria, representaba un cambio en la estructura política de la nación.

Así terminó la perpetua dominación del PRI, desde los tiempos de Lázaro Cárdenas, con el arribo del PAN, partido de tendencia centro derecha, que eligió, como su primer presidente a Vicente Fox.

  La democracia que surgió, y se fortaleció, en los años 90, ha sido un progreso estabilizador para la sociedad y la estructura política mexicana. Por eso, estas elecciones de hace dos domingos, tienen un alto significado para México, donde, dentro de la ecuación, existen, paralelamente, la tranquilidad que ofrece la democracia, y la intranquilidad de una posible tentación de López Obrador de retornar a los tiempos aquellos de la continuidad automática, ahora practicada por su partido, Morena.

Muchos, en el ambiente político y económico mexicano, ven con creciente recelo la popularidad y pujanza política de López Obrador, que con poco más de dos años en la presidencia, cuenta con un respaldo favorable de la población que pasa del 60%.

Se llega a pensar, en ciertos círculos, que AMLO, teniendo suficiente mayoría en el Congreso, comience una enmienda constitucional para continuar en el poder, al término de su sexenio como ordena la presente constitución. Esto, en nuestra opinión, pertenece más bien al mundo de las especulaciones al vacío. López Obrador, ha mostrado, en su recorrido por la vida pública de muchos años, ser un político astuto que sabe conjugar su retórica populista demagoga, con la realidad de su entorno. Esta posibilidad, en el criterio sensato, no tiene mucha validez; aunque, sí existe la probabilidad, de que, retornando a las prácticas de sus predecesores, escoja al futuro presidente, para mantener la influencia de su agenda, en las cuestiones políticas de importancia en el país.

Es prudente contrastar la suspicacia de estos elementos, con la realidad de hoy.

En su retórica de campaña, López Obrador hablaba de confiscaciones, nacionalizaciones, y modificaciones a los contratos de Pemex con las compañías extranjeras, y otras cosas por el estilo, pero, hasta ahora, nada de eso ha sucedido. Por supuesto que esto pudiera cambiar en el curso de los tres años que le quedan en la presidencia. Pero, por ahora, concentremos el análisis en el presente.

¿Es Andrés Manuel López Obrador, un presidente autoritario? Sí, lo es, sin embargo, no en el extremo en que lo pintan sus oponentes. Su autoritarismo, de corte populista, es sui géneris, puesto que no desconoce la democracia y no se eleva a los extremos vistos en otros mandatarios latinoamericanos. El suyo es, más suave, y hasta pudiera catalogarse como persuasivo. Es, obviamente, suficiente para llenar las expectativas de los mexicanos.

Para la mayoría del pueblo mexicano, su presidente no amenaza su tradición democrática, que, con todos sus defectos, es un ejemplo para América Latina con sus casi cien años de periódicas elecciones presidenciales cada sexenio.

El temor pre electoral de un López Obrador extremista radical no ha materializado. Durante sus dos años y medio en el poder, no hay en México presos políticos, la fuerza pública no ha cometido abusos contra sus opositores, y la prensa sigue disfrutando de la libertad esencial para cumplir sus funciones.

Las elecciones recién celebradas lejos de confirmar temores de inquietud, ratifican que la nación no está perdiendo sus avances socio políticos de los últimos 30 o 40 años, sino que, por el contrario, la asistencia a las urnas de 90 millones de los 126 elegibles para el sufragio, son un testimonio de la estabilidad política de México.

Una vista a la geografía del área, pone a México a la vanguardia de América Latina, en la continuidad, y estabilidad, en su proceso democrático.

López Obrador no será capaz de alterar ese ritmo.

BALCÓN AL MUNDO

Emmanuel Macrón, presidente de Francia, se fue a Tain-l’Hermitage, una pequeña ciudad en el sudeste del país, en una visita de campaña electoral para las elecciones presidenciales que se celebrarán en Francia el año próximo.

Un individuo cercano a la barda que separaba al presidente de los asistentes, al acercarse éste a saludarlo, le propinó, sorpresivamente, una bofetada. Monsieur Macón, le president, actuó como un presidente, que, además, es una persona culta y sofisticada.

El sujeto, que no es más que un grosero pelafustán, fue detenido y tendrá que explicarle a un juez, el por qué, de su irrespetuosa agresión al presidente.

 *****

La Unión Europea le pide explicaciones al español Joseph Borrell por su inexplicable defensa y descarado contubernio con el despotismo cubano. La actitud de este viejo político español ha sido motivo de serios cuestionamientos a través de varios años, sin que haya podido ofrecer una razón justificable.

 Llegó al extremo, en tiempo reciente, de amenazar a un país latino de retirarle los fondos para comprar vacunas, si no retiraba su voto de condena contra Cuba por violación de los derechos humanos.

*****

  Casi concluido el conteo, todo parece indicar que será el ex maestro rural Pedro Castillo, marxista, fidelista y chavista, y no Keiko Fujimori, el próximo presidente de Perú. De ser así, las noticias no son buenas para el país andino, ni para el vecindario inmediato. Hará alianza con Venezuela, Nicaragua, Cuba y los elementos comunistas de Evo Morales que dominan en Bolivia.

La América Latina sigue siendo un continente en erupción.

*****

  El Senado, en forma bipartidista, aprobó un fondo de 250 billones de dólares para, como parte del plan para reconstruir nuestra infraestructura, hacer frente al reto chino contra nuestra posición tecnológica. Es mucho dinero, que se agregará al ya elevado déficit que asciende a 30 trillones de dólares, pero es, absolutamente necesario. Hay gastos que se justifican. Otros no.

Temas similares…

A UNA PULGADA DEL ARMAGEDÓN

Seis disparos, quizás siete, rompieron lo que hasta entonces había sido un meeting político acostumbrado del Partido...

0 comentarios

Enviar un comentario