Por José “Chamby” Campos

Este pasado miércoles Lionel Messi sorprendió al mundo futbolístico al llegar a un acuerdo que lo convertiría en miembro del “El Inter-Miami”, el equipo de balompié de esta ciudad. A pesar de que todavía el contrato no está finalizado el solo hecho de que esté dispuesto a prestar sus servicios a La Liga de Fútbol de EE.UU., MLS, es una excelente noticia. 

Miami triunfó sobre París, Barcelona y Arabia Saudita; ciudades con equipos que competían por los derechos del astro argentino.

París lo perdió cuando el equipo Paris Saint-Germain no hizo esfuerzos por volver a firmarlo. Barcelona básicamente no estaba dispuesta a luchar con las demandas que las organizaciones europeas requerían del equipo catalán. Finalmente, el clima, la calidad de vida y la oportunidad de elevar el deporte en Norteamérica fueron los factores decisivos para que la familia Messi se relocalice a nuestra área.

Aunque se sabe que los conglomerados Apple y Adidas lo recompensarán, el primero por las nuevas suscripciones a los juegos en televisión y la última en la venta de sus productos; más las concesiones que la MLS van a permitirle, suman una enorme figura, esta nunca llegaría a la altura de la exorbitante cantidad de alrededor de un billón de dólares que el equipo árabe le estaba proponiendo.

Según rumores la esposa del medio campista: Antonela Roccuzzo, no estuvo contenta con la cantidad de tiempo que tuvieron que estar viviendo en un hotel en París mientras sus hijos estudiaban. Aparte no aprobaba la idea de criar la familia en Arabia Saudita mientras que aquí en el área de Aventura son dueños de varias propiedades.

De todas maneras, la llegada del Súper Estrella a Miami es un triunfo no solo para la organización del Inter-Miami sino para un deporte que a pesar de ser el más popular del mundo no termina de cuajar en EE.UU.

Impacto económico para el sur de la Florida

El costo de la publicidad que ha generado y generará en el futuro su persona es incalculable en término de relaciones públicas. Durante los primeros 10 minutos después que se diera la noticia, el sitio de las redes sociales del equipo recibió un millón de seguidores y los boletos para el primer juego subieron de $29 a $467, figura que ha seguido incrementando. Los demás partidos también han sido impactados ya que los equipos rivales han vendido todas las entradas.

Su presencia en el equipo atraerá grandes figuras que en otras instancias no estarían interesados en hacerlo y por ende establecerán residencias en nuestra ciudad añadiendo fuentes de ingreso.

La Copa América del próximo año se llevará a cabo en EE.UU. y Miami está batallando el ser la anfitriona de la final; por lo que Messi pudiera ser una pieza clave para convencer a los organizadores.

Al mismo tiempo Dade County será una de las sedes durante La Copa Mundial 2026 que se jugará en México, Canadá y EE.UU. Interesantemente pudiera darse el caso que Messi se retirara en Miami si Argentina llegara a la final y el partido se jugara aquí. 

Un lugar en el 

firmamento deportivo 

estadounidense

Messi acaba de lograr el único título que lo evadía cuando se coronó campeón mundial en Qatar y si bien el balompié es el deporte más popular del universo, el mercado deportivo estadounidense es el sueño de todo atleta. 

Poder unir su nombre a estrellas de la magnitud de Ted Williams, Michael Jordan, Tom Brady, Shohei Ohtani, Pelé y muchos más; es un reto que el Astro rosarino probablemente desea.

La MLS le estará tendiendo la alfombra roja sabiendo que, si existe un futbolista capaz de cambiar el destino de la liga, él es el indicado.

¡Lionel Messi, bienvenido a Miami!