Cuba: Mambises nacidos en otras tierras

Written by Enrique Ros*

10 de agosto de 2022

Una obra que reconoce la enorme contribución y el alto número de libertadores nacidos en otras geografías.

Combatientes de otras

nacionalidades ( II de V)

CARLOS ROLOFF. REGIONALISMO

Y LOCALISMO

Mediaba el año 1865 cuando llega a Cuba, procedente de los Estados Unidos, donde había participado como oficial en el ejército confederado un joven que 23 años antes había nacido en la lejana Varsovia el 4 de noviembre de 1843. Se trataba de Carlos Roloff que al llegar a nuestra isla se estableció en un comercio en Caibarién, Las Villas, cultivando estrechas relaciones con los residentes locales.

Cuando Las Villas se incorpora a la guerra emancipadora que se había iniciado en octubre del 68 la experiencia militar adquirida por el joven foráneo le facilitó convertirse en líder militar de la localidad con el grado de Mayor General y Jefe del Estado Mayor de Las Villas, probando su habilidad en el combate de el ingenio San Gil uno de los primeros que se producen en la provincia central.

No fue fácil en aquella región la obtención de recursos militares lo que hizo que el impaciente Roloff marchara, junto con sus compañeros villareños, hacia la provincia Oriental participando en los combates de Jíbaro, Río Grande, Marroquín y Lázaro López, este último un fuerte español a unos pocos kilómetros de Ciego de Ávila; pero pronto regresa a Las Villas donde se hace cargo de la División de Malezas, una de las tres en que queda dividida la región de Las Villas y según las notas del español Francisco Villamil ocupaba el mando de otra de las divisiones que antes dirigió, por muy breve tiempo, Florentino Jiménez. Peleará en el área de Remedios, en contacto con tropas de Serafín Sánchez, José Payán, en un área no muy cercana a la trocha, con mucho valor pero muy escasos recursos miilitares y, moviéndose entre Remedios, Sancti Spíritus, Sagüa la Grande y otras zonas se mantiene Roloff.

No obstante, se produce en julio de 1872 una tirante situación entre el Presidente Céspedes y el General Roloff que lleva a aquél, en el mes de julio, a ordenar el arresto del polaco Roloff por «haber presentado un memorial calumnioso y ofensivo para el Presidente de la República» pero la situación quedó prontamente resuelta y en su diario anota Céspedes el miércoles 31 de julio «Roloff retractó su material y dio explicaciones satisfactorias»; el 25 fue puesto en libertad.

Carlos Roloff vuelve nuevamente hacia las provincias de Camagüey y Oriente. Ahora bajo las órdenes de los Mayores Generales Ignacio Agramonte, en Camagüey; y Modesto Díaz en Oriente, de donde regresa a la provincia central al avanzar hacia ella, pasando el General Máximo Gómez la trocha, donde se le confirma a Roloff su jefatura de la Brigada de Remedios y el mando de la Segunda División en sustitución del General José González Guerra que había muerto el 28 de febrero del año 75.

Pero siguen las fricciones del joven polaco con sus superiores. El 7 de septiembre de 1875 el General Gómez lo destituyó por mantener a las tropas inactivas e indisciplinadas designándolo Jefe de Comunicaciones del Tercer Cuerpo de aquella provincia. Comienzan las fricciones de Roloff obstaculizando el avance de la invasión comandada por Gómez que culmina con la entrevista entre ambos en Los Pozos el primero de octubre de 1876 en que el polaco Roloff le expresa a Gómez que los jefes villareños no aceptan la jefatura de éste en la provincia central. Será, ahora, Roloff el jefe del Ejército Libertador en Las Villas, pasando a Serafín Sánchez al mando de la Primera División de aquella provincia.

Pronto el 18 de noviembre de aquel año 76 se produce un fuerte encuentro entre las fuerzas comandadas por el General Roloff y una columna integrada por batallones de los regimientos Pizarro y de la Reina, bajo las órdenes del coronel español Ayuso en Nuevas de Jogosí, cerca de Sancti Spíritus, perdiendo las tropas españolas más de 250 hombres entre muertos y heridos y en cuyos encuentros resultaron heridos los tenientes coroneles Francisco Carrillo y Serafín Sánchez. Se ocupaba Roloff de la jefatura del Tercer Cuerpo del Ejército y de dos Divisiones comandadas por los brigadieres Francisco Vega y Ángel Maestre.

Le imponía Roloff una apreciable actividad a Sagüa y Cienfuegos, de las que era ahora su principal responsable mientras se realizaban algunas acciones en Sancti Spíritus y Remedios. Tensiones y fricciones existían entre varios jefes de la zona: Marcos García, Pancho Jiménez, y Serafín Sánchez en momentos en que, en otros niveles surgieron diferencias que conducirían a la Paz del Zanjón, cuya Acta de Capitulación de las fuerzas villareñas se firmaría en la finca el Mamey el 18 de marzo de 1878. Saldrá de Cuba Roloff con destino a Nueva York para participar, como Tesorero, y luego Secretario, del Comité Revolucionario Cubano.

Permanecerá varios años en Panamá y Honduras; Roloff será llamado por Martí para una reunión en Nueva York que sería uno de los primeros pasos de la Constitución del Partido Revolucionario Cubano. Aquel hombre que había nacido en una tierra tan lejana tendría el honor de dirigir la primera expedición armada en la Guerra de Independencia del año 95, en el vapor James Woodall que desembarcaría el 24 de junio por Tayabacoa cerca de Trinidad y Sancti Spíritus. Volverá nuevamente Roloff.

Con armas traídas por el General Roloff en la segunda quincena de marzo de 1897, cerca de Banes, las tropas de Calixto García, al mando de Periquito Pérez, toman las alturas que dominan aquel puerto de mar, combate en Jiguaní y se prepara para el ataque y toma de Victoria de las Tunas. La expedición de Roloff había venido en el Laurada y desembarcado en el estero de Júcaro, en Banes, el 21 de marzo de 1897.

SE INCORPORA UN CHILENO A LA GUERRA DE

 INDEPENDENCIA DE 1895

Pedro Vargas Sotomayor nació en Santiago de Chile en 1868 y formará parte de la armada chilena en la que alcanzó el grado de teniente. Vargas Sotomayor llegó a Cuba a comienzos del 95 y en abril ya hace contacto con los insurgentes cubanos incorporándose a las fuerzas del entonces Teniente Coronel Juan Pablo Cebreco; poco después era ayudante de campo del Mayor General Antonio Maceo.

Participa en el combate de Sao del Indio el 31 de agosto de 1895 donde las fuerzas combinadas de Antonio y José Maceo combatieron una columna española integrada por un batallón del Regimiento Simancas, tres escuadrones y 200 hombres de tres escuadras de Guantánamo; el jefe de la columna española era el Coronel Francisco Borja Canellas. Las fuerzas cubanas, encabezadas al principio sólo por José, fueron atacadas. Antonio, que se encontraba cerca vino a auxiliar a su hermano y combinadas ambas fuerzas en las alturas de Sao del Indio, forzaron la retirada de las tropas de Borja Canellas. El encuentro, que concluyó la llamada Campaña de Oriente de Antonio Maceo, lo describe en detalle el Brigadier Miró Argenter en sus «Crónicas de la Guerra».

Se destaca el chileno Vargas en el combate de Mal Tiempo el 15 de diciembre de 1895 cuando parte de las tropas comandadas por el General en Jefe Máximo Gómez y el Lugarteniente General Antonio Maceo combatieron en ese lugar, en las cercanías de Cruces, Las Villas, contra una agrupación de fuerzas integradas por la columna del Teniente Coronel Narciso Rich que incluía dos compañías del Regimiento de Bailen, dos del de Canarias y una sección de caballería del Regimiento la Montesa.

Así veía allá, la prensa española, la situación tras el combate de Mal Tiempo:

«Del 10 al 13 de diciembre (1895) los mambises maniobraron, combatieron en los Altos de Manacal y prosiguieron el avance. Estaban prácticamente sin municiones y parecían abocados a luchar sólo a machetazos cuando el combate de Mal Tiempo les permitió apoderarse de cartuchos españoles.

Aprovechemos este combate de Mal Tiempo para mostrar el contraste en la conducta de algunos oficiales cubanos y españoles.

(Continuará la semana próxima)

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