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París (Francia), 22 may (EFE).- (Imagen: María D. Valderrama) Ni tuvieron un papel menor ni se limitaron a la pintura intimista. París reivindica con fuerza los nombres de artistas mujeres que han pasado desapercibidas en la Historia del Arte, con dos grandes exposiciones en el Centro Pompidou y el Museo de Luxemburgo.

Ni tuvieron un papel menor ni se limitaron a la pintura intimista.
 
París reivindica con fuerza los nombres de artistas mujeres que han pasado desapercibidas en la Historia del Arte, con dos grandes exposiciones en el Centro Pompidou y el Museo de Luxemburgo.
 
Cerca de 70 obras que van del período prerrevolucionario hasta la Restauración francesa se exponen en el museo de luxemburgo con el objetivo de acabar con los clichés y «las diferencias maniqueas» que han pesado tradicionalmente en los estudios sobre pintoras.
 
Además de los nombres más sonados, como Élisabeth Vigée-Lebrun o Adélaïde Labille-Guiard, la exposición recupera excelentes pintoras como Constance Mayer,  o Marie-Gabrielle Capet.
 
Desde el Pompidou, las mujeres de la escuela Bauhaus, la cubana Carmen Herrera o la argentina Martha Boto, protagonizan la exposición Ellas hacen la abstracción.
 
Una relectura de la historia de la abstracción desde finales del siglo XIX hasta 1980 mostrando la contribución de unas 110 mujeres artistas y poniendo en evidencia el «proceso de invisibilización» por el que ha estado marcado su trabajo.