“No era necesaria una revolución porque Cuba era un paraíso de América”, advirtió Darío Miyares, quien, en la época republicana, ocupó un cargo importante en las directivas de las famosas tiendas El Encanto, que revolucionaron el mundo de la moda y de las compras en aquella época.
Miyares argumentó su posición en el hecho de que Cuba, en tiempos pasados, fue una de las grandes “potencias” en América y el Caribe, ya que inclusive su moneda estuvo en algunos momentos por encima del dólar.
Pero vino la revolución y se asentó en 1959 y acabó con todo y provocó que miles, pero miles de cubanos, decidieran salir para el exilio ya que la tiranía había lanzado una infame y fiera persecución contra los opositores algunos de los cuales fueron llevados al cadalso.
EL TURISMO
“El turismo y el entretenimiento en Cuba eran de los más prósperos en esta parte del continente, hasta el punto de que los más famosos cantantes, como Frank Sinatra, tuvieron que ir a la isla a presentarse para alcanzar la fama y el prestigio mundial”, insistió Miyares.
“A todo esto hay que agregar el avance y el poderío en la industria agrícola, inicialmente, como país arrocero y, luego, como nación tabacalera, además de los prestigiosos comercios en La Habana, a donde iban los famosos a comprar sus trajes”, sostuvo.
“Por todo esto no se comprende por qué hubo una revolución comunista en un país tan fructífero que, inclusive, demostró que ni siquiera Fidel podía romper toda esa hegemonía de prestigio y poder y, por el contrario, decidió acabar con todo esto”, reflexionó Miyares.
“Fue tan grande el poder económico de Cuba, que en tiempo récords, alcanzó a posicionarse como uno de los principales países exportadores de ganado en pie, superando las estadísticas que se había impuesto la República de la Argentina”, destacó.
De acuerdo con estadísticas del pasado, para 1953, el 76,4% de la población cubana sabía leer y escribir, lo que ubicaba a la isla en la cuarta posición de América Latina en cuanto a índices de alfabetización.
Mientras, en 1957, ya el país se colocaba en el primer lugar de la región con menor mortalidad infantil y con mayor número de médicos y camas en los hospitales por habitantes, según el estudio.
«Cuba estaba al frente de una serie de indicadores, sorprendentemente de tipo social, cuando se compara con la América Latina de la época. Y eso también era así en cuanto a indicadores económicos», explicó Miyares.
EL “PIB”
Las investigaciones señalaban que para 1958, el Producto Interno Bruto, PIB, por habitante de la isla se colocaba en tercer lugar de la región (solo superado por Venezuela y Uruguay), por lo que la tasa de inflación ese año era virtualmente cero.
“Pero la grandeza de los cubanos fue mucho más allá, porque la mayoría que emigró hacia los Estados Unidos, poco a poco, fue posicionándose en puestos de avanzada tanto en la empresa privada como en la empresa pública”, resaltó.
“En el exilio cubano existen distintas organizaciones que simbolizan los avances de Cuba en sólo medio siglo, antes de 1959, cuando ya existe una organización que es distinta y única en cuanto a la composición de sus miembros, y ella es la Asociación de Antiguos Empleados de las Tiendas El Encanto”.
“Esto debido a que es formada por trabajadores quienes, en poco tiempo, la crearon como “la gran familia de El Encanto”, desde que fue fundada en 1888 y ya repartía sus ganancias entre sus empleados”, recordó Miyares.
EN ESPAÑA
“Y lo más grande que hubo, fue que algunos empleados, con esas ganancias, llamadas dividendos, empezaron sus propios negocios como los almacenes Ultra, la Sastrería Ríos, Las Sederias Carretas, las Galerías Preciado y el Corte Inglés en España que tuvo resonancia y fama mundial por muchos años”, dijo.
“Pero tenemos que recordar que el 13 de octubre del 1960, el desgobierno se robó alrededor de 600 empresas privadas, entre ellas Solís Entrialgo y Compañía S.A, que manejaba por departamentos las tiendas El Encanto”, agregó.
“Ese fatídico día, varios empleados renunciaron a sus puestos, y emprendieron el camino hacia el exilio, principalmente, hacia los Estados Unidos, España, Puerto Rico y Venezuela, donde inmediatamente que llegaban se comunicaban entre ellos y se ayudaban lo mejor posible”, agregó.
“REENCUENTRO”
“Aquí en Miami se reunían en su lugar de residencia y trataban de comunicarse con los que ya habían llegado hasta que en 1980 se fundó la corporación que comenzó con un almuerzo anual y un evento que se llamó “Reencuentro”, acotó.
“La asociación no solamente se ha dedicado a rememorar el éxito económico de la empresa cubana, de la cual eran parte las tiendas El Encanto, sino también a exaltar en un video el Festival de Cuba Nostalgia durante 13 años consecutivos”, expresó.
“Esta organización ha sido tan grande, que, mediante la labor de voluntarios, realiza actividades en comedores Carrol Manors del Condado Miami Dade, así como en otros centros de cuidados de retirados”, insistió Darío.
Ahora tenemos en proyecto uno que se llamaría “Senior Care”, por parte de la asociación, que sería como una especie de corporación caritativa sin ánimo de lucro, inscrita formalmente en el Estado de la Florida”, concluyó.
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