Este 9 de octubre se cumplen cien años del nacimiento de Olga Guillot, la cantante cubana que durante sus más de siete décadas de carrera cautivó a miles de personas con boleros como «La gloria eres tú», «Cuando estoy contigo», «Soy tuya» o su ‘himno’ «Miénteme».



Por Amparo Mármol

La Reina del Bolero falleció en 2010 a los 87 años en Miami (Estados Unidos) sin haber podido cumplir su sueño de volver a una «Cuba libre», pero sigue viva en el recuerdo por unas canciones que enamoraron a millones de parejas y que interpretó por los escenarios de medio mundo hasta poco antes de su muerte.

«La noche de anoche», «Qué sabes tú», «La mentira», «La canción de mis canciones», «Lágrimas negras» o «Campanitas de cristal» fueron algunos de los temas más representativos de la Guillot, como cariñosamente la llamaban sus admiradores.

«El bolero está de moda y siempre lo estará, porque canta al amor y las pasiones, que son los que mueven la vida de la gente», decía Guillot, que estuvo casada hasta en cinco ocasiones y que reconoció que, como en las letras de sus canciones, lo más importante de su vida era haber amado y haber sido amada.

Considerada una de las figuras más emblemáticas en la historia de la música romántica del siglo XX con más de 60 discos grabados, fue reconocida con 10 Discos de Oro, 2 de Platino y 1 de Diamante, así como un Grammy Latino a la trayectoria en 2007, el mismo año en que recibió el Premio a la Excelencia Musical de la Academia Latina de la Grabación (LARAS).

Además, participó en 16 películas, entre ellas, «Opio», «No me olvides nunca» o «Música de ayer», y trabajó en teatro y televisión.

GRANDES ÉXITOS DESDE SU JUVENTUD

Olga Guillot nació en Santiago de Cuba el 9 de octubre de 1922 en una familia de artistas de origen catalán, estudió canto en el Conservatorio de La Habana y empezó en la música junto a su hermana Ana Luisa, con la que formó el «Dúo Hermanitas Guillot», que en 1938 obtuvo el premio de un importante concurso de radio.

Desde que en la década de los 40 entró en el cuarteto vocal Siboney y debutó como solista en el «Zombie Club» de La Habana, sus actuaciones se sucedieron en los principales teatros de la capital cubana.

Estrenó el bolero «La gloria eres tú» de José A. Méndez en 1946 y ese mismo año grabó la versión en español de «Stormy Weather», con la que logró su primer éxito discográfico.

Sus sensuales y dramáticas interpretaciones la llevaron a realizar largas giras por Argentina, Chile, Perú, Brasil y Colombia. Con «Miénteme», su canción más famosa, obtuvo en 1955 el Disco de Oro.

Proclamada la Mejor Voz Cancionera de Cuba durante tres años consecutivos, de 1954 a 1956, cantó varias temporadas en el famoso cabaret Tropicana y consiguió colocar en el primer lugar de los discos más escuchados «Tú me acostumbraste», del compositor matancero Frank Domínguez.

Trabajó en Europa por primera vez en 1958, con actuaciones en Italia, Alemania y Francia, donde compartió el escenario con la legendaria Edith Piaf en el famoso Casino de Palm Beach, en Cannes.

Volvió a ser galardonada en 1961 con el Disco de Diamante por ser la cantante cubana con más discos vendidos en el período de 1954 a 1960.

Ese mismo año abandonó Cuba con su hija Olga María, fruto de su relación con el compositor René Touzet, cuando el régimen castrista le intervino sus propiedades.

Después de salir de Cuba, se asentó en un principio en Venezuela para vivir hasta su muerte entre México y Miami.

POPULARIZÓ EL 

BOLERO POR EL MUNDO

Con su voz extraordinaria popularizó el bolero alrededor del mundo y las giras musicales y los triunfos se sucedieron en una exitosa carrera artística que se prolongó más de siete décadas.

En 1963 Olga Guillot fue galardonada por la Academia de Artes John F. Kennedy de Hollywood con el premio Golden Palm en reconocimiento a la mejor bolerista hispanoamericana.

Ese año también tuvo lugar su primer y famoso concierto en el Carnegie-Hall de Nueva York, el primero de una artista de origen latino, y en 1965 se presentó junto al trío Los Panchos y Miguelito Valdés en el teatro Paramount de Broadway.

Es en esa época cuando la Reina del Bolero actúa al lado de Frank Sinatra en la inauguración del hotel Manila-Hilton de Filipinas e interviene en el Festival de Eurovisión.

La artista cubana celebró sus Bodas de Oro con el Bolero en diciembre de 1988, tan solo unos meses después de haber participado al lado de boleristas de la talla de Lucho Gatica y Roberto Ledesma en el espectáculo Los 100 Años del Bolero, en República Dominicana.

Tras 20 años sin pisar un estudio de grabación, editó en 2001 un nuevo disco, «Faltaba yo», que incluía arreglos de famosos boleros como «Miénteme» y «No sigas por favor», así como nuevos temas.

UNA VIDA PENSANDO

EN VOLVER

Hasta los últimos días de su vida, Olga Guillot mantuvo la fe en que podría regresar a Cuba, cuando el régimen castrista abandonara el poder, y se convirtió, como muchos de sus compatriotas, en una voz de denuncia contra la situación de su país.

«Tengo fe en que algún día mi país pueda ser libre y que toda la gente bonita que está allá (Cuba) pueda sentir esa emoción (de libertad) alguna vez. Yo todos los días hablo con Dios y le pido que me dé un poco más para ver si puedo llegar a ese momento», anhelaba la legendaria cantante en 2009, un año antes de fallecer.