Por  Daniel Galilea

El turismo responsable consiste en viajar, hospedarse y realizar todas las actividades asociadas a visitar un lugar por placer, reduciendo el impacto ecológico y preservando los recursos naturales del sitio que visitamos. Unas sencillas prácticas nos ayudan a aplicarlo sin esfuerzo en nuestras vacaciones.

Disfrutar de unas buenas vacaciones, viajar a destinos atractivos, y vivir experiencias turísticas memorables es perfectamente compatible con aplicar la responsabilidad medioambiental en nuestros lugares de destino, aseguran los especialistas en turismo responsable, considerado como una de las tendencias emergente en el sector turístico.

El adjetivo “responsable” se refiere en este caso a la responsabilidad ambiental, que significa reducir el impacto ecológico y preservar los recursos naturales de los lugares que visitamos, explican desde la escuela de negocios EAE Business School (EAE-BS) en Barcelona (España) 

Esta forma de viajar también implica mantener comportamientos que tengan efectos positivos en las comunidades que se visitan desde el punto de vista sociocultural, incluyan la protección del patrimonio artístico, cultural y tradicional y fomenten la conservación de los monumentos y tradiciones locales, según EAE-BS.

Originalmente el turismo sostenible (TS) y el turismo responsable (TR) eran dos conceptos diferentes: se referían respectivamente al impacto de la actividad turística, en el medio ambiente, por un lado, y por otro en las poblaciones locales a nivel social, cultural como económico, pero hoy en día se tiende a usar ambos términos de forma conjunta, aseguran.

Además algunos expertos denominaban TS a las prácticas sostenibles de la industria turística y TR al comportamiento de los turistas que aplicaban la sostenibilidad en sus viajes, 

Sea como fuere, y más allá de cuestiones de nomenclatura, al reservar unas vacaciones es preferible tener en cuenta los elementos ambiental y social, para transformarse en un viajero atento al mundo y a sus habitantes, según EAE-BS.

Haciendo un lugar para el medioambiente en la maleta

“Cada vez son más las personas concienciadas acerca de que es indispensable reciclar los residuos, reducir el uso de plásticos y cuidar el planeta, así como respetar la naturaleza y sus distintas formas de vida vegetal y animal, incluida la humana. Estos conceptos también son aplicables al turismo”, señala Óscar Fernández, responsable de Comunicación de Civitatis.

“Al responsabilizarnos de cuidar el medio ambiente y el planeta cuando visitamos otros lugares también estamos cuidando el futuro del turismo y los viajes, porque contribuimos a preservar el patrimonio natural, cultural y social de los destinos que visitamos para las futuras generaciones de turistas y viajeros”, enfatiza Fernández.

El equipo de Civitatis Plataforma especializada en visitas guiadas y excursiones en todo el mundo, sostiene que realizando pequeños gestos diarios ayudamos a que nuestro entorno sea más sostenible, y ofrecen algunas claves para contribuir a la preservación del ecosistema cuando viajamos.

— Lleva tu propia botella reutilizable

“Cuando viajamos tendemos a consumir un porcentaje mayor de agua embotellada, lo cual puede aumentar la contaminación por plásticos”, según los especialistas.

Para cooperar con el medioambiente recomiendan llevar con nosotr@s una botella reutilizable y rellenarla con agua de procedencia segura. “De ese modo, podremos mantenernos bien hidratados, sin contaminar, cuando estemos en una ciudad o un entorno calurosos,” apuntan.

— Utiliza la bicicleta a menudo

Los especialistas de Civitatis recomiendan desplazarse en bicicleta, no solo porque resulta saludable, sino porque el uso de transportes sin motor a combustión ayuda a reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera. 

“Las rutas ciclistas son una actividad habitual en muchos itinerarios de viaje, y algunas capitales como París invitan a sus ciudadanos y visitantes a que realice un tour en bici para disfrutar de los monumentos de forma sostenible y divertida”, señalan.

— Prueba la gastronomía local

“Cuando salimos de viaje, lo más probable es que busquemos probar las delicias de la gastronomía tradicional, conocer los productos culinarios locales y degustar los platos típicos del lugar. ¡Esto también es un signo del turista eco-responsable!”, destacan desde esta plataforma.

“Al participar en un tour gastronómico consumiendo productos locales en un país como México, estamos contribuyendo a reducir el uso de transportes contaminantes y los gastos relacionados con los alimentos”, explican.

— Evita dejar residuos en las playas

Las excursiones a las playas tropicales son una alternativa ideal para conocer las bellezas de un país tropical, pero debido a la masificación turística, cada vez son mayores los residuos que se acumulan en los bellos parajes litorales del mundo, aseguran.

Para ayudar a reducir esta contaminación física y visual,  basta con realizar gestos tan sencillos como recoger la basura que hemos generado, no tirar las colillas de cigarrillos en la arena y utilizar protectores solares que no dañen el medio ambiente, señala desde Civitatis.

— Súbete al transporte público

“En ciudades como Nueva York, el uso del transporte público es utilizado a diario por miles de personas, que sin saberlo, están ayudando a reducir las emisiones de gases nocivos, al reducir la cantidad de vehículos de combustión circulando por las calles. El beneficio para el medioambiente es mayor si el transporte elegido es eléctrico, como el Metro”, destacan.

“Si, por ejemplo, estamos en la Gran Manzana visitando el Empire State y luego tenemos previsto realizar una visita guiada por Brooklyn, utilizar la red del New York City Subway, puede ser ¡un pequeño paso para el hombre, pero un gran paso para la humanidad!”, según esta misma fuente.

— Deja tranquilos a los animales y las plantas

Para los amantes de la naturaleza y adictos a descubrir los enclaves más recónditos del planeta, es muy sencillo disfrutar del viaje preservando uno de los elementos más importantes del entorno: la vida silvestre, a menudo amenazada, señalan.  

“Si por ejemplo se está efectuando un tour de exploración en algún paraje del río Amazonas, no hay que molestar a los animales ni llevarse ninguna planta, así como respetar las costumbres de la zona indicadas por el guía”, apuntan.

— Llévate ‘souvenirs’ artesanales

“Dado que los productos hechos a mano son considerados como más ecológicos que los industriales, al adquirir este tipo de artículos como recuerdo de un viaje, estamos ayudando a la economía del lugar y a reducir la contaminación ambiental” ,  explica Óscar Fernández, de Civitatis

“En lugares como Marrakech, es fácil comprar productos de artesanía típicos en las ‘medinas’ (barrios antiguos de las ciudades árabes), contribuyendo así a una buena causa: la preservación del medioambiente”, concluye.