Por: Álvaro J. Álvarez
Según una publicación del periódico Los Ángeles Herald, del martes 10 de mayo de 1898 el vapor Gussie transportó un cargamento de armas para los insurgentes cubanos. Cien soldados norteamericanos velarán que las municiones sean debidamente entregadas en manos de los insurgentes.
El 9 de mayo, el Capitán W.H. Dorst, después de una larga conferencia con el General James Franklin Wade esa noche, partió en un tren especial a las 11 pm para el Puerto de Tampa.
El vapor Gussie, un barco de la línea Mallory, de 998 toneladas, estuvo fletado por la Southern Pacific Company desde el 30 de abril hasta el 11 de septiembre de 1898 por $350 por día.
El Gussie era conocido como un barco filibustero, porque se usaba para enviar armas y personas involucradas en la Guerra de Cuba antes que los EE.UU. entraran directamente en ella, en junio de 1898.
Toda la operación fue anunciada por la prensa a lo largo y ancho del país. Las tropas embarcaron el día 9 de mayo en horas de la noche, pero el Gussie no zarpó hasta el día siguiente por la tarde y una gran multitud se congregó cerca de los muelles de Tampa para verlo salir.
Junto a las tropas embarcaron, en calidad de prácticos y enlace con las fuerzas cubanas, dos experimentados comandantes del Ejército Libertador, Donato Soto y Antonio Caíñas y un ordenanza. También subieron a bordo del vapor un grupo de periodistas, escritores y dibujantes.
Zarpó hacia Cuba cargado con armas, municiones y suministros proporcionados por el gobierno para uso de los cubanos. Una compañía de 100 soldados estadounidenses del Primer Regimiento de Infantería acompañó la expedición y ayudó a proteger el desembarco del valioso cargamento y de ser necesario, penetraría en el interior lo suficiente como para poner los suministros en manos de los insurgentes.
La expedición estuvo a cargo del Capitán W.H. Dorst, ayudante del General Miles, quien acababa de regresar de Cuba.
El Gussie llevaba a bordo entre 6,000 y 7,000 rifles Springfield, alrededor de 200,000 cartuchos de municiones y varios cientos de cajas de provisiones, que consisten principalmente en carnes enlatadas y galletas.
Se mantuvo el mayor sigilo sobre el punto de desembarco, pero en vista del reciente desembarco del Capitán Dorst cerca de La Habana, donde se comunicó con el coronel Pedro Delgado Carcache (1864-1912), se cree que la expedición se dirigió a un punto no muy lejos de La Habana.
El Gussie había montado en su cubierta delantera un cañón de fuego rápido de una libra. Se entiende, sin embargo, que será recibido en algún punto no lejos de Cayo Hueso por una cañonera del escuadrón de bloqueo y El Whitney, el barco gemelo del Gussie, que zarpó hacia Dry Tortugas el sábado, con dos compañías de la Quinta Infantería, regresó hoy. Se cree que seguirá al Gussie a Cuba tan pronto como se pueden cargar armas, municiones y suministros. Antes de una semana se cree que los líderes insurgentes habrán sido provistos de armas suficientes para al menos 15,000 hombres y con una base de suministros establecida en la costa, una vigorosa campaña contra los españoles.
Aquí están llegando grandes cantidades de pólvora y proyectiles para el escuadrón de bloqueo. En Cayo Picnic (entre Marco Island y Everglades City) hay 12 vagones cargados con torpedos de dinamita, pólvora y otras municiones, que serán enviados a Cayo Hueso, y otros tantos vagones están en las vías del muelle.
El Gussie trató de desembarcar su cargamento al oeste de Bahía Honda en Pinar del Río, según lo previsto por el coronel Pedro Delgado, quien estaba esperándolos. Pero fueron tiroteados por los españoles, al cual contestaron. Entonces comenzaron a bordear la costa, hacia el este, hasta lograr encontrar un lugar propicio y desembarcaron por Orozco entre Bahía Honda y Cabañas.
Según cuenta el Sr. James M. Adams en su libro Pionering in Cuba (1901) el vapor Gussie desembarcó armas y suministros en la zona de La Gloria, porque los mambises se subieron a un Árbol Mirador que les servía como torre de vigilancia para poder observar la llegada de los barcos a la bahía cercana.
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