DE LA REDACCIÓN DE LIBRE Y FUENTES ANEXAS

El martes 11 de noviembre es un día festivo y nacional en Estados Unidos, reservado para honrar a quienes prestaron servicio en las Fuerzas Armadas de Estados Unidos.

Esta fecha no debe confundirse con el Memorial Day, jornada en la que se recuerda a los hombres y mujeres que murieron en combate.

La diferencia principal es que el Día de los Caídos (Memorial Day) honra a los militares que murieron en servicio, mientras que el Día de los Veteranos (Veterans Day) celebra a todos los que han servido en las fuerzas armadas, ya sean vivos o fallecidos. 

El Día de los Caídos es un día de luto y reflexión que ocurre el último lunes de mayo, y el Día de los Veteranos es un día de celebración el 11 de noviembre. 

El 11 de noviembre de 1919 se celebró el primer aniversario de la culminación de la Primera Guerra Mundial. Ese día, fue declarado por el presidente Woodrow Wilson como el Día del Armisticio, para conmemorar a quienes perdieron la vida en la Primera Guerra Mundial.

Después, en 1938, el Día del Armisticio fue declarado como un feriado legal; y en 1954, pasó a llamarse el Día de los Veteranos. Desde entonces durante este día se recuerda a todos los veteranos de las Fuerzas Armadas de EE.UU.

Si la fecha cae un sábado, el feriado laboral se celebra el viernes, y si cae un domingo, se pasa al lunes siguiente.

Con el paso del tiempo y luego de finalizada la Segunda Guerra Mundial, el veterano Raymon Weeks, originario de Birmingham, Alabama, propuso que el Día del Armisticio incluyera a todos los veteranos de cualquier contienda.

El general Dwight D. Eisenhower respaldó la iniciativa y promovió la creación del Día Nacional de los Veteranos. Raymon Weeks encabezó la primera celebración en 1947 y continuó haciéndolo hasta su fallecimiento en 1985 en su estado natal. 

En 1982, el presidente Ronald Reagan le rindió homenaje otorgándole la Medalla Presidencial de la Ciudadanía y lo nombró el “Padre del Día de los Veteranos”.

LIBRE se honra en rendir tributo, desde su portada, a las distintas ramas militares de los Estados Unidos, sin olvidar el espíritu familiar y fraternal que caracteriza estas celebraciones. Frente a los instintos perversos de los agentes de la hoz y el martillo (comunistas), que solo buscan desestabilizar y oprimir a las sociedades libres, reafirmamos nuestro reconocimiento:

Honor a nuestros hombres y mujeres de uniforme.

Honor a quienes lo han sacrificado todo por una nación libre, independiente y democrática.