En una verdadera tarea titánica Santiago Álvarez de la organización Rescate Jurídico quien ha sostenido siempre una ardua campaña de apoyo a los opositores en Cuba, es quien se encuentra al frente del traslado a Miami de Martha Beatriz Roque Cabello, para que continúe su recuperación tras permanecer hospitalizada en estado grave en La Habana por más de dos semanas, y poder salvarle la vida dándole un tratamiento médico en Miami.

Álvarez agradeció infinitamente a funcionarios norteamericanos, en la Embajada de los Estados Unidos en Cuba, quienes colaboraron en la salida de la valiente opositora cubana rumbo a Miami para ser sometida a un tratamiento médico urgente.

A principios de esta semana el propio Álvarez, acompañado  de miembros de la fundación Rescate Jurídico, se desplazaron al aeropuerto de Miami para recibir a Martha Beatriz Roque y luego internarla en una clínica particular para su respectivo tratamiento médico.

Santiago Álvarez dejó en claro en entrevista con el periodista que, por el momento, la opositora cubana no suministrará entrevista a la prensa, hasta que no se encuentre en condiciones físicas que le permitan hablar con los periodistas.

Su permanencia en dicha clínica, cuyos gastos correrán por parte de la Fundación Rescate Jurídico, es completamente reservada y supervigilada para evitar la presencia de fotógrafos o camarógrafos de prensa que intenten mostrarla en una sala de urgencias y de recuperación medica.

“Esta no es solamente una tarea humanitaria sino además un gesto de patria”, afirmó Álvarez, quien adelantó que luego de la recuperación de Martha Beatriz Roque, ésta será trasladada a unas semanas de absoluto reposo y descanso en Miami.

 Álvarez dijo que se cumplieron diligencias urgentes y reservadas para sacar a la líder opositora de Cuba, luego de que en La Habana el personal médico que la atendió, diagnosticó que su estado era muy grave y delicado.

Como se sabe desde un principio Beatriz Roque permaneció en estado grave y bajo fuerte vigilancia del régimen en un hospital controlado por la seguridad del estado que desplegó un operativo dentro y fuera del centro médico.

Hasta hace menos de ocho días la opositora y expresa política cubana Martha Beatriz Roque Cabello estuvo internada en el Hospital Clínico Quirúrgico Hermanos Ameijeiras, en La Habana, en estado grave con criterio reservado.

Su situación física, se mantuvo bajo estricta vigilancia de la Seguridad del Estado, reveló  el opositor Ángel Moya, quien no pudo ocultar  su preocupación por el estado físico de Roque, ya que en Cuba no hay medicinas ni equipos adecuados para haberla atendido como era debido.

En Miami fuentes de entero crédito revelaron que Martha Beatriz Roque Cabello, de 79 años, enfrenta ahora mismo complicaciones de salud derivadas de una diabetes mellitus descompensada pese a que su función renal ha mostrado mejoría.

Su presión arterial está controlada y la neumonía que le fue diagnosticada permanece estable, sin necesidad de oxígeno. Aunque sigue con alimentación asistida, los médicos han programado su primera movilización, lo que podría indicar una leve evolución en su estado.

Roque Cabello había sido trasladada, recientemente, desde el Hospital Manuel Fajardo al Ameijeiras para someterse a un procedimiento hemodialítico, tras ser ingresada inicialmente debido al agravamiento de su estado de salud.

 “En Cuba lo he dejado casi todo, porque he tenido que venir rápido, porque estoy enferma”, declaró a varios periodistas y miembros de Rescate Jurídico, quienes estuvieron atentos a su llegada a Miami también dentro de la mayor reserva y discreción.

¿Algún mensaje para su pueblo de Cuba?, preguntó un periodista, a lo cual ella contestó con su rostro bastante demacrado: “Sí, que espere la libertad que va a llegar pronto”. En el aeropuerto estuvieron presentes su hermana Elena, a quien hacía diez años que no veía.

Santiago Álvarez también reveló que tras haber sido dada de alta en Cuba, el Gobierno de Estados Unidos “le otorgó el visado para que continuara su tratamiento médico en este país”. 

 Santiago Álvarez reveló que pudo traer a Roque después de mantener diligencias desde hace cuatro meses e, inicialmente,  tuvieron contacto con la Universidad  de Miami y los seminaristas y después con los hospitales que tenían los recursos médicos  que nosotros no teníamos  y, por último el régimen, que temía que se muriera en Cuba, decidió entonces cooperar.