Un estallido de alegría se vivió en la noche cuando de repente comenzó a llover nieve en el parque Douglas de la ciudad de Miami en un acto organizado para la comunidad por parte del comisionado Manolo Reyes.
Sorpresivamente se comenzó a rociar de nieve una parte del parque donde los más pequeños sintieron en vivo y en directo la llegada de la Navidad con una noche fría y blanca al estilo de la zona norte de América.
Los niños comenzaron entonces a lanzarse bolas de nieve y a jugar en al área inundada por un manto blanco sintiendo que estaban, a lo mejor, en otro estado de los Estados Unidos.
“Qué lindo espectáculo. Me siento feliz. He sentido la frialdad de la nieve…Nunca había experimentado una cosa así tan emocionante”, dijo el pequeño Alberto.
0 comentarios