Mensaje Inspiracional. ¡FELIZ AÑO NUEVO!

Written by Libre Online

29 de diciembre de 2025

Faltan pocas horas para recibir un nuevo año. Todos deseamos que nos vaya bien, que podamos alcanzar nuestras metas y que la felicidad nos acompañe cada día.

Tal vez para muchos se cumplan los anhelos con los que imaginaron este nuevo comienzo. Pero para otros habrá dolor, desesperanza, dificultades económicas, conflictos familiares o laborales, enfermedades y tantas otras pruebas. Y esto ocurre porque vivimos en un mundo en el que no estamos exentos de lo bueno ni de lo malo. A eso le llamamos vida.

En la vida atravesamos distintas pruebas, aquellas que Dios permite en nuestro camino. Muchas veces llegan para llamarnos la atención, para recordarnos que Él está a nuestro lado, esperando tener una relación personal con cada uno de nosotros, dispuesto a ser parte de nuestra historia y a ayudarnos a cargar esa pesada mochila de problemas que, en ocasiones, llevamos sobre los hombros.

Otras veces esas pruebas fortalecen nuestra fe, porque —aunque no queramos admitirlo— el orgullo nos hace creer que podemos resolverlo todo solos. Tal vez en algunos casos sea así, pero en innumerables situaciones necesitamos el apoyo de alguien muy especial, y ese alguien se llama Dios.

El fin de año siempre llega como el cierre de un capítulo de nuestra vida, invitándonos a hacer una pausa, a mirar hacia atrás y recordar lo vivido: los aciertos, los errores y todo aquello que nos dejó una enseñanza para seguir creciendo y ser mejores.

Entre prisas, risas y lágrimas, atravesamos los 365 días, y hoy, último día del 2025, llegamos nuevamente al final de un ciclo.

Al hacer un balance, recordaremos a quienes nos brindaron alegrías y también a quienes, quizás sin quererlo, nos causaron tristeza. Para algunos no fue un año fácil; para otros, resultó mejor. Así es la vida: se transita un día a la vez, con la esperanza de ser bendecidos.

Este es el momento de soltar aquello que genera angustia y resentimiento. Perdona y olvida, para comenzar un nuevo año lleno de paz, gozo y esperanza.

Abraza fuerte, no solo con los brazos, sino con el corazón, a esas personas de las que estás alejado por una razón u otra.

Deja de mirar por el espejo retrovisor. El ayer ya pasó; el mañana es una promesa. El día es hoy. Piensa cómo puedes ser mejor, más feliz, más libre, más creativo. Porque hoy se cierra un capítulo y mañana se abre uno nuevo… y dependerá de cada uno de nosotros cómo escribirlo.

Cambiemos lo que haya que cambiar, dejemos atrás lo que pesa y abracemos lo que viene. Porque, en definitiva, el 31 de diciembre no es un final:

¡Es una nueva oportunidad para esperar que en el 2026 seamos bendecidos por el amor de Dios!

¡Feliz Año Nuevo!

Temas similares…

0 comentarios

Enviar un comentario