Nunca cierre la puerta,
Puerta que hable de Dios,
Ábrela de dos en dos
Y la lira queda completa.
No hay una canción
Que al mencionar a Jesús,
Que no sea una luz
que alumbra el corazón.
Es un fuerte honor
Escribir una lira
Si se la rechaza al que la inspira
Está rechazando a Jesús.
Cuida lo bello escrito
Nunca darle de lado,
Ese es el bien cuidado
que quiere Jesucristo.
Hay que amar lo divino
Como un gran tesoro
Eso brilla más que el oro,
porque así es el destino.
Caminemos siempre unido
Por ese camino crucial
y seguro se puede encontrar
Lo que Dios siempre ha querido.
Siendo Dios el poderoso
Sobre la tierra y el cielo
Que es todo poder y anhelo,
Sobre Él no debe haber desvío.
Pedro León López
Spokane, WA.
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