Tegucigalpa, 5 sep (EFE).- El canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, denunció este jueves que existe una coalición de «fuerzas oscuras» para desestabilizar a la presidenta hondureña, Xiomara Castro, y evitar un nuevo triunfo electoral del oficialista Partido Libertad y Refundación (Libre) en las elecciones generales de noviembre de 2025.
En un mensaje en la red social X, Reina aseguró que existe una «conspiración» en contra de Castro y su esposo, el expresidente Manuel Zelaya, derrocado en 2009, y que «fuerzas oscuras» se han reagrupado en una coalición para evitar que el Partido Libre vuelva a ganar las elecciones del próximo año.
«La conspiración es clara, después del resultado electoral aplastante de 2021, que superó los fraudes de 2013 y 2017 que hizo el Partido Nacional y la parte golpista del Partido Liberal, para evitar que la presidenta @XiomaraCastroZ y @PartidoLibre llegarán al poder, esas fuerzas oscuras del golpe de 2009, tanto internas como externas se han reagrupado», subrayó el canciller.
Agregó que el «narco-Estado y la corrupción institucional, que hizo que Honduras llegará a ser el puente donde pasa el 90 % del tráfico de droga a EE.UU. después del golpe (de Estado), están buscando prevenir otro triunfo electoral, esto unido a nuevos y remozados ambiciosos».
Reina indicó también que la trayectoria de Castro y Zelaya «la pueden escudriñar como lo han hecho por 20 años esas fuerzas oscuras y que en todo este tiempo, a pesar de la manipulación y politización de la justicia, no han podido presentar un caso real».
Gobierno de Castro no es narco-Estado
Afirmó que las acciones de una persona, en referencia a un video que muestra a Carlos Zelaya, cuñado de Castro, reunido con narcotraficantes, «le hace responsable a él de sus actos y de demostrar lo que ocurrió ante la justicia».
«Es la responsabilidad de alguien demostrar sus hechos y de los que lo acusan de que es culpable o no, no es la responsabilidad de todos, ni es una acción criminal colectiva como la de los que lo hicieron por 12 años en la narcodictadura, no olvidemos lo que ocurrió», afirmó.
El proyecto político de Libre, cuyo objetivo es «transformar» Honduras y a su pueblo en un sistema «justo, social y democrático», según Reina, «no es el culpable de la crisis que atraviesa el país.
Carlos Zelaya admitió el 31 de agosto que en 2013 se reunió con narcotraficantes hondureños que le ofrecieron dinero para la campaña del Partido Libre, lo que fue confirmado el 3 de septiembre en un vídeo divulgado por la organización estadounidense InSight Crime.
«Los que gobernaron con la ilegalidad y que abusaron para instituirse en un cártel son otros. No permitamos que nos confundan. No nos pongan en el plano del narco-Estado. Los que tenían el poder, la justicia, el Ministerio Público, la Corte Suprema de Justicia y las fuerzas de seguridad y permitieron la construcción de un emporio criminal fueron ellos», apuntó el canciller hondureño.
Destacó además que la presidenta hondureña «lucha» para que continúe el proceso democrático y para que «no se destruya» a las Fuerzas Armadas, que desempeñan un papel fundamental en la defensa de la Constitución.
«En el fondo sigue siendo la lucha de ellos los del ilícito transnacional contra los que hemos defendido al país y la democracia con dignidad», apostilló el canciller de Honduras.