En los estadios de Chicago y Boca Ratón se sintió como nunca la fiesta patria de la independencia de Colombia y, como en ningún otro sitio de los Estados unidos, la rumba se prolongó hasta altas horas de la noche pues aún se sigue palpitando la libertad en esta nación suramericana.

En 6000 Glades Rd Suite 1008, Boca Ratón, Florida, se concentraron también cientos de colombianos desde tempranas horas del domingo para reiniciar la rumba de independencia al son de los vallenatos y las cumbias con orquestas populares de tambores y gaitas.

La mayoría de las familias, que vinieron desde Miami, lo hicieron en las populares y famosas “chivas”, que son buses pintados con la bandera de Colombia y con comportamientos de asientos, pero sin ventanas donde los pasajeros pueden viajar viendo el panorama de las carreteras.

En el estadio principal de la ciudad de Chicago, el consulado de este país, lo rentó para dar cabida allí a los rumberos de Colombia que se desplazaron desde tempranas horas del domingo a este lugar para vivir la fiesta de independencia en un ambiente pacífico pero lleno de música caribeña y comida típica.