En la iglesia del colegio Belén, en el oeste de Miami, se llenó por completo luego de que amigos y familiares fueron allí a despedir al recordado y admirado Juan Manuel Salvat.

Juan Manuel Salvat, quien por muchos años dirigió la Editorial Universal, se convirtió en editor de los libros de prestantes escritores y políticos, cuyos ejemplares luego fueron a ingresar a las bibliotecas de universidades de la Florida.

En la misa de recordación en memoria de este ilustre cubano, quien colaboró en la nueva salida del periódico Trinchera, estuvieron sus cuatro hijos y su esposa Marta, quienes recibieron las condolencias de los asistentes.

“Juan Manuel fue un extraordinario cubano porque durante su vida impulsó totalmente la cultura cubana a través  de la Librería Universal y apoyó a los escritores que deseaban editar sus libros”, recordó el Dr. Manuel Alzugaray.

“Con su aporte también engrandeció la historia y ayudó a la difusión de la literatura de los exiliados”, insistió Alzugaray, quien estuvo presente en la misa de recordación, donde oficiaron sacerdotes de origen cubano.