El dirigente y empresario Cubano Santiago Álvarez, un ‘padre a todo dar’

Written by Germán Acero

10 de junio de 2025

Antes de ser un exitoso empresario y dirigente del exilio cubano, Santiago Álvarez, ha sido un “padre a todo dar”, que siempre se ha preocupado por sus hijos y ahora por sus nietos, inculcándoles ese legado de que hay que trabajar duro para conseguir dinero y para poder salir adelante en la vida.

 “En la vida nada es fácil. Pero yo me he preocupado porque mis hijos sepan ganarse el dinero honradamente para tener un buen futuro sin que nadie tenga por qué endilgarles o echarles algo en cara o señalarlos por cualquier cosa”, afirmó Santiago.

“Les inculqué además el valor de que hay que trabajar duro para alcanzar lo que uno quiere y compartirlo en familia”, insistió Santiago Álvarez, padre de Santiago Joaquín y Vivian Patricia, quienes ahora son exitosos como su padre.

Santiago Álvarez tiene seis nietos. “Como padre y abuelo ha sido un hombre maravilloso”, afirmó por su parte su esposa Carmen, quien lo acolita en todas las campañas que él hace para apoyar a los opositores en Cuba.

“Desde niños los eduqué en el ambiente del amor por la familia. Y poco a poco fueron aprendiendo el precio que tiene en la vida saber trabajar para ganarse el dinero que uno necesita para vivir honradamente. Y estudiar para salir adelante profesionalmente”, recordó Santiago.

“Ellos son unos seres maravillosos. Siempre me he comprendido con ellos en todos los proyectos que hemos realizado. Y me han colaborado mucho en cuestiones de negocios. Mi hijo, desde niño, siempre ha estado a mi lado. En las buenas y en las malas”, expresó emocionado Santiago Álvarez.

“Siempre hemos sido una familia muy unida. Por eso mis hijos han crecido a mi lado con valores. Son unas personas correctas y muy educadas. Me siento orgulloso por ellos, créamelo, porque son mi mayor tesoro en la vida”, reiteró Santiago.

“De muy pequeños sufrieron mucho cuando yo estaba al lado de las campañas y luchas por la libertad de Cuba. Pero siempre han comprendido esa fe y esperanza que he tenido para que mi patria algún día pueda ser libre y soberana”, reiteró Álvarez.

“Nunca me han reprochado porque siempre estoy insistiendo en esas luchas, al contrario, me han apoyado dándome estímulo y aliento para seguir adelante. Ellos también se interesan mucho por el tema de Cuba”, añadió.

Santiago agradece a la vida que todavía tiene  salud para compartir paseos, hazañas y ratos en el mar con sus nietos. “Sienten admiración por su abuelo. Yo hay veces que me siento con ellos en la sala y les comparto mis anécdotas y hazañas como dirigente y luchador cubano”, recordó Santiago Álvarez.

“Ellos se emocionan mucho cuando les muestro fotografías y les leo cartas y otros escritos sobre la lucha en Cuba. Se emocionan especialmente cuando se trata de grandes odiseas como la que tuve con el barco donde alisté a hombres valientes para luchar en la isla”, relató.

“Mis hijos también viven todas estas historias en familia. Mi hijo y mi hija saben que los amo entrañablemente porque me dieron esos nietos tan preciosos que ahora han venido a enriquecerme sentimentalmente en la vida. Soy un hombre feliz”, insistió.

“Los pocos ratos libres que tengo, fuera de mi trabajo, los dedico para compartir con mis hijos, mis nietos y con mi esposa. Carmen ha sido una mujer maravillosa porque se ha dado a querer mucho por ellos. La respetan y la admiran mucho”, expresó Álvarez.

“Así es como vale la pena vivir. Rodeados de amor. Yo supe guiar a mis hijos en este camino y, ahora, me ha tocado con mis nietos. Ellos, los niños, tienen manifestaciones familiares que me alegran la vida, sobre todo, cuando ellos están rodeados por sus padres”, aseguró Santiago. 

“Mi mayor alegría, en esta conmemoración del Día del Padre, es que tanto mis hijos como mis nietos, han crecido con valores. Esos valores que le hacen ser buenas personas. Gente de darse a querer por todo el mundo. Dejando a un lado el orgullo y las fantasías económicas”, precisó.

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