José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch (HRW), dijo en rueda de Prensa en el Miami Dade College que en la historia de Cuba no se había visto, en los últimos tiempos, una salvaje represión contra los opositores como ahora donde se detuvo a 500 y se juzgó a 67.

“Fueron arrestados, vejados y condenados, simplemente por no comulgar con la ideología política del régimen y, mucho menos, con las infames leyes que ellos han impuesto para reprimir al pueblo durante las últimas protestas”, advirtió Vivanco en la reunión con los periodistas en el MDC.

Vivanco denunció que la mayoría de estas personas, increíblemente, han sido cubanos de a pie, que no tenían ninguna participación con las protestas como las del pasado 11 de julio, estando ya tras las rejas, hombre s y mujeres inocentes, quienes han sido juzgados y condenados injustamente.

Vivanco admitió que una investigación que adelantó su organización, en las últimas semanas, dio como resultado que se recibieron testimonios en firme de 130 casos que no tienen ningún asidero ni valor jurídico de cubanos que fueron vejados y doblegados por el régimen comunista.

“Se hicieron estas tomas de testimonios, con asesoría de periodistas, abogados, defensores de derechos humanos y otros, en alrededor de 14 de las provincias cubanas, donde la policía política y agentes de seguridad participaron en esa represión tan brutal”, insistió.

«La represión en Cuba ha sido sistemática, no ha sido casual y obedece a una política de Estado para frenar de raíz cualquier intento del pueblo de organizar una protesta pacífica», afirmó Vivanco ante periodistas en una sala de conferencias del MDC.

Vivanco sostuvo también que “el objetivo de este informe fue para visualizar y registrar lo que nadie está haciendo. Y se centró   en documentar qué pasó con las manifestaciones pacíficas y cómo reaccionó el régimen”.

Al arremeter conta el régimen, a raíz de la represión desatada por las últimas protestas, Vivanco denuncio también que “los patrones de represión que utilizó el régimen cubano para sofocar las manifestaciones de julio pasado fueron recogidos en un informe de «interrogatorios abusivos constantes».

 “Y, además, vejaciones de carácter «sexual», «humillaciones y privación del sueño». Y sacó a la luz pública el caso de una activista llamada María Cristina a la que los agentes le obligaban a gritar “¡viva Fidel!”.

No quiso dejar en silencio la denuncia también de que «hay menores detenidos” y nombró el de un joven de 17 años que no identificó y que fue «obligado a desnudarse delante de los guardias y hacer sentadillas».

Vivanco se refirió también al activista y artista Luis Manuel Otero Alcántara como una «preocupación especial» de HRW, ya que continúa detenido «por desacato», como también sigue preso José Daniel Ferrer, líder la organización Unión Patriótica de Cuba (Unpacu).

Se mostró sumamente preocupado porque, en síntesis, se refirió al   derecho universal a la protesta pública, denunciando que «Los procesaron como si pertenecieran a una organización criminal, por el simple hecho de  protestar, de forma pacífica”. 

Vivanco enfático que es muy probable que, para las protestas del próximo 15 de noviembre, quizás, el pueblo este más preparado para enfrentar los anuncios de represión que desde ya ha hecho el régimen para intentar sofocarlas.

“Estamos hablando de una dictadura. No es cualquier persona, él es el jefe, la cabeza, de una maquinaria represiva que se ha mantenido en el poder por más de sesenta años. Y ahora puesto allí a un títere sin cabeza como es Díaz-Canel”, sintetizó.

Vivanco concluyó su rueda de prensa advirtiendo que “no solo han existido detenciones arbitrarias sino también se ha documentado «maltrato brutal, golpizas brutales» contra los manifestantes, en su mayoría, cubanos de a pie”.

Finalmente reiteró que la mejor forma de apoyar a la situación de Cuba a nivel internacional es denunciando las acciones que están cometiendo las autoridades comunistas «para que surja un grado de preocupación y repercusión internacional».