Por María C. Rodríguez
La civilización maya habitó una vasta región ubicada en Norte y Centro América, geográficamente en Norteamérica pero denominada Mesoamérica, en el territorio hoy comprendido por cinco estados del sureste los Estados Unidos Mexicanos que son, Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán; y en América Central, en los territorios actuales de Belice, Guatemala, Honduras y El Salvador, con una historia de aproximadamente 3.000 años.
• Primera profecía: Según esta profecía, el 22 DE DICIEMBRE DE 2012 el Sol recibirá un rayo sincronizador del centro de la galaxia con el que se iniciará un nuevo ciclo. Será el fin del mundo de materialismo y destrucción en que vivimos y el inicio de una nueva etapa de respeto y armonía. Antes de ese día, la humanidad deberá optar entre desaparecer como especie pensante que atenta contra el planeta o evolucionar hacia una nueva Era de integración con el resto del Universo.
• La segunda profecía anunció que, a partir del eclipse del 11 de agosto de 1999, las transformaciones físicas en el Sol alterarían el comportamiento de los hombres. Dijeron que algunos perderían el control de sus emociones y otros afianzarían su paz interior para sincronizarse con los ritmos de la galaxia. Así podrán neutralizarse los cambios drásticos que describen las siguientes profecías.
• La tercera profecía dice que aumentará la temperatura de la Tierra y producirá desequilibrios climáticos y geológicos. La falta de sincronía entre nuestro comportamiento y la naturaleza traerá grandes problemas como la evaporación del agua de los suelos, incendios forestales y la destrucción de las cosechas. Serán vórtices de energía que limpiarán la superficie de la tierra, que son la manifestación de la inconformidad de nuestro planeta y de las energías elementales contenidas en su interior. La actitud que tomemos será crucial para sobrellevar esta época de crisis.
• La cuarta profecía: Aquí se predice una ola de calor que provocará el derretimiento del hielo de los polos. Según los mayas, este será el modo en que el planeta se limpiará y reverdecerá, pero a la vez se inundarán las costas y miles de personas que viven cerca del mar se enfrentarán a serios peligros.
• Según la quinta profecía, si no sintonizamos nuestro comportamiento con los ritmos de la naturaleza y la galaxia, antes del 2012 veremos fallar todos los sistemas sobre los que está basada nuestra civilización. Se producirá un colapso de la red informática, la electricidad, el sistema económico y la religión. A partir de estos hechos, el hombre verá la necesidad de reorganizar la sociedad de un modo más armónico y menos competitivo. y si a eso le agregamos el aumento en la actividad del sol, que puede causar daños irreparables en los satélites, la situación se complica. También puede suceder que los 19.000 objetos que se encuentran en la órbita de la tierra, al recibir una alta dosis de electromagnetismo del sol vean dañados sus componentes electrónicos y dejen de funcionar para siempre.
• La sexta profecía habla de la aparición de un cometa que traerá transformaciones físicas muy bruscas en nuestro planeta. A partir de sus cálculos, los mayas aseguran que existen altas probabilidades de que el cometa choque con la Tierra. Pero a la vez, sostienen que es posible desviar su trayectoria por medios físicos o psíquicos.
• En la séptima profecía los mayas nos dejaron un mensaje de esperanza. Dijeron que a partir de un esfuerzo voluntario por lograr la armonía y la paz interior, podremos desarrollar nuevos sentidos e integrarnos al funcionamiento de la galaxia. Así podremos reducir los efectos nocivos anunciados por las otras profecías y renacer en una nueva Era, «la Era de la Luz». Para los mayas los procesos cósmicos son cíclicos y nunca cambian. Lo que cambia es la consciencia del hombre que pasa a través de ellos, siempre en proceso de perfección.
0 comentarios