Por José “Chamby” Campos
Cerramos un capítulo más al finalizar el año 2024 y como en los anteriores, nos llegan las noticias de tantas figuras del mundo deportivo que se despiden de sus seguidores.
El Football Americano fue testigo de la marcha de Aaron Donald, uno de los mejores jugadores de línea defensiva en la historia de la NFL. Los terrenos de béisbol jamás volverán a ser anfitriones del lanzador Stephen Strasburg y el excelente primera base Joey Votto, dos peloteros que elevaron el nivel de Las Grandes Ligas. La Liga Nacional de Baloncesto, NBA, presenció las ultimas canastas del ex-jugador del año Derrick Rose y el centro español Marc Gasol.
Sin embargo, la partida más notoria es la de otro hijo de la Madre Patria.
Este pasado 10 de octubre, Rafael Nadal anunció su retiro del tenis profesional en un emotivo video que se publicó en sus redes sociales. A los 38 años y tras una carrera llena de éxitos y desafíos, el mallorquín decidió guardar su raqueta y colgar su camiseta.
El zurdo gladiador se despidió oficialmente el pasado noviembre durante las semifinales de la Copa Davis que se llevaron a cabo en Málaga y donde desafortunadamente para los de la península ibérica, fueron derrotados por el equipo de Los Países Bajos.
Los números que adornarán su resumé para siempre son bien impresionantes. En cinco ocasiones alzó la Copa Davis siendo el protagonista de su país al cual también le regaló dos medallas de oro olímpicas, fue campeón 22 veces en competencias Grand Slam, (estas son las de mayor categoría), y dueño de 92 títulos ATP con un promedio de 82.6% de juegos ganados durante 24 años de lucha. Sin duda un futuro miembro del Salón de La Fama.
El “Rey de la arcilla” dijo que la decisión no había sido fácil, pero que las últimas dos temporadas habían sido extremadamente difíciles debido a las lesiones que lo habían limitado a competir esporádicamente y con muchas dolencias.
Desde su debut en el circuito profesional en el 2001, el balear se destacó por su condición física, tenacidad, resistencia y habilidad en la cancha. Sin embargo, su carrera no estuvo exenta de desafíos. A los 17 años, Nadal fue diagnosticado con una condición genética, un tipo de artritis que afecta los huesos de los pies, que amenazó con cortarle su carrera. En varias instancias los médicos le dijeron que probablemente nunca volvería a jugar tenis profesionalmente. Sin embargo, el joven español superó esta adversidad y regresó a la competición, demostrando una vez más su espíritu indomable.
Su nombre siempre será recordado como uno de los tres jinetes que dominaron las canchas, en su caso particular las de arcilla, del tenis mundial. Junto al suizo Roger Federer y el serbio Novak Djokovic protagonizaron una era donde entre ellos tres obtuvieron 66 trofeos Grand Slams.
Sus batallas frente a los dos otros titanes arrojaron los siguientes resultados; de 40 partidos frente a Federer salió victorioso en 24 ocasiones, pero en Grand Slams su marca fue aún más dominante al terminar 10-4. Contra Djokovic ganó 29 veces y perdió 31 durante todas las competencias sin embargo en los Grand Slams, Rafa lo aventajó 11-7.
Además de sus logros en los terrenos de juego, Nadal es conocido por su humildad y respeto hacia sus compañeros y rivales. En su video de despedida, agradeció a toda la industria del tenis y a sus compañeros, especialmente a sus dos grandes rivales, por las muchas horas compartidas a través de los años. También destacó la importancia del papel que su familia jugó en su carrera, mencionando que su madre había hecho todos los sacrificios necesarios para que él pudiera llegar a triunfar.
El retiro de Nadal marca el fin de una era en el tenis, pero su legado perdurará. Su dedicación, pasión y espíritu de lucha han inspirado a generaciones de jugadores y aficionados.
El 2025 ha llegado y el Grand Slam comienza dentro de unas semanas en Australia. Nuevas figuras se incorporarán al rígido itinerario de competencias a través de las cortes de tenis del planeta y nuevas estrellas surgirán; pero Rafael Nadal siempre será recordado como uno de los mejores tenistas de todos los tiempos, una verdadera leyenda del deporte.
España lo vio nacer y el resto del mundo se apoderó de él.
Hasta la vista Rafa.
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