Por Roberto Luque Escalona

*Frente al Capitolio, una multitud de vociferantes proclama su apoyo a los palestinos. En el recinto parlamentario, un desafiante Benjamin Netanyahu promete continuar la lucha en la franja de Gaza hasta liquidar a los terroristas de Hamas. Por cierto, se necesita un alto grado de maldad para defender a esos asesinos. ¡Y hay que ver el fervor con que los defienden!

*Creo que las posibilidades de Kamala Harris ante Trump son poco menos que nulas. Entre otras cosas, ella tiene una trastienda algo así como lóbrega.

Más que lóbrega, tenebrosa. Es una comunista. Debo decir que he subestimado la capacidad de simulación de los comunistas americanos. Han llegado a la vicepresidencia como quien no quiere la cosa, y si no fuera por Trump podrían estar tocando a las puertas del poder. Del poder absoluto, que es el único que ellos conciben. Kamala Harris es comunista aquí y en el otro velorio, por eso debo preguntarme cómo fue que llegó a ser vicepresidenta. Joe Biden, ese viejo camaján, es muchas cosas, ninguna de ellas buena, pero nunca supe que fuera izquierdista. En fin, que ahora más que nunca hay que cerrar filas con Donald Trump.

*Un sentimiento sumamente maligno y peligroso presente en la vida americana es el sentirse culpable por la esclavitud a que fueron sometida las personas afroamericanas y la discriminación que tuvo como secuela. Lo cierto es que lo padecido por sus ancestros esclavos los hizo nacer en América. Hoy no existe un país donde los afroamericanos vivan mejor que aquí, que lo que algunos de ellos llaman miseria, en otro país sería bienestar. Claro, ser víctimas es algo que puede resultar muy provechoso, por eso hay personas que víctimas dicen ser.

*A todas estas, me pregunto a quién se le ocurrió postular a Kamala Harris como compañera de boleta de Biden. Y no me digan que el vicepresidente tiene pocas atribuciones, atribuciones que no necesita para ser una posición de importancia, que se acrecienta si el presidente es un hombre de avanzada edad, como es el caso de Joe Biden. Bueno sería saber quien o quienes la promovieron para ese puesto, que la ha llevado a las puertas de la Casa Blanca siendo una figura de segunda fila. Imagine que Joe Biden, un octogenario, sufra una crisis de salud que inhabilite o lo remita al cementerio. Pues tendríamos a Kamala Harris de presidente. Los vicepresidentes, deben ser y siempre han sido personajes de cierta importancia antes de ocupar ese cargo, como Theodore Roosevelt, Harry Truman y Gerald Ford. Conclusión: en los altos niveles del Partido Demócrata hay comunistas emboscados que llevaron a Kamala Harris a la vicepresidencia y que a la Presidencia tratarán de llevarla.

*Tremendo pucherazo el de Nicolás Maduro. Debo reconocer la visión de futuro del difunto Hugo Chávez. Elegir como heredero político a un antiguo chofer de transporte público parecía un disparate, pero no lo fue. El gigantesco cholo tiene una característica fundamental en un dictador, que es la voluntad de poder. Difícil será desbancarlo.

*Las Olimpiadas han puesto en evidencia la condición de Francia de país al borde de la desintegración. Eso es lo que trae el permitir la entrada masiva de gentuza tercermundista. Esa gente no sirve. Nunca sirvió. Nunca servirá. No es una casualidad que sus países sean… lo que son. Lo que siempre han sido.            

*Hace un tiempo se habló de lo que parecían ser unas extrañas construcciones submarinas en aguas cubanas, frente a la península de Guanahacabibes, el extremo occidental de la Isla. No he vuelto a tener noticias de ellas. Claro, en Cuba todo es tenebroseo y misterio. Hasta la Arqueología.

*Parece que intentarán subir a la superficie un navío de fines del siglo XVIII, hundido frente a las costas de Cádiz. Es -o fue- una nave de las muchas que cruzaron esas aguas. Lo que me intriga es que se gasten dinero y esfuerzo en tal rescate cuando muy cerca de allí está el pecio del Santísima Trinidad, que fue el barco más grande que navegó en el último tercio del siglo XVIII y principios del XIX y, probablemente, el navío más artillado de la Historia, con 136 cañones, barco y artillería fabricados en La Habana. Nunca hubo otro barco de vela que tuviera esas dimensiones.

Razón tuvo Marisela Verena cuando dijo que “nosotros los cubanos no somos nada chauvinistas. Al ser tan superiores, sólo somos realistas”. Nuestra condición excepcional se ha manifestado hasta en lo negativo. En Cuba nació Fidel Castro, el más perverso y destructivo hijo de puta que ha conocido el Nuevo Mundo.

*Desde que surgió como la rival de Trump al retirarse Joe Biden a Kamala Harris, de quien nadie hablaba antes de que tal cosa ocurriera, le ha caído encima un aguacero, y lo peor, para ella, es que no parece tener paraguas.

*Los miembros del Servicio Secreto encargados de proteger a Trump, estuvieron hora y media observando los movimientos del sujeto que le dispararía. ¿Qué esperaban? ¿Acaso ver si el sujeto disparaba o no? Con el dinero que tiene, Donald Trump debería escoger su propio equipo de protección. El Servicio Secreto no parece interesado en protegerlo. Simplemente, hace como si lo protegiera.

*El Barón Pierre de Coubertin, promotor de los Juegos Olímpicos, acuñó una bella frase para la Historia: “Lo importante no es vencer, sino competir”.  Toda una joya diplomática porque la mayoría de los que compiten no tienen la menor posibilidad de vencer. Hace unos días se publicó la cifra de países que jamás han ganado una medalla olímpica. Debí apuntarla, pero no lo hice. Son mucho más que la centena y media. El primer latinoamericano en ganar una medalla de oro fue el esgrimista cubano Ramón Fonts. De eso hace mucho más de un siglo.