De milagros se salvan tres periodistas colombianos. “Un cohete cayó sobre nosotros cuando comíamos en un restaurante de Ucrania”

Written by Demetiro J Perez

5 de julio de 2023

Sergio Jaramillo, Catalina Gómez y Héctor Abad, víctimas de una explosión en un restaurante de Ucrania, vivieron un verdadero milagro para contar ahora semejante e increíble historia que ellos mismos aún tampoco la creen.

 Jaramillo, periodista y Comisionado de Paz, junto con el escritor Héctor Abad y la reportera Gómez, aún siguen sonámbulos por el espantoso ruido que sintieron tras la tremenda explosión.

“Fue un ataque con misiles de alto calibre”, dijeron los tres tras resultar ilesos tras un ataque en Ucrania. Ellos estaban en ese país difundiendo la campaña ‘Aguanta Ucrania’.

 En el lugar en donde ocurrió el ataque también se encontraba la periodista Catalina Gómez Ángel.

«En la noche de hoy, mientras cenábamos en el restaurante RAI pizzería de Kramatorsk con Victoria Amelina, una extraordinaria escritora ucraniana, y la gran periodista Catalina Gómez, fuimos objeto de un ataque de Rusia con un misil”, relataron.

“Era un misil de los que llaman “crucero” lanzado contra el restaurante, que hizo parte además de un complejo comercial, que quedó envuelto en llamas y destruido totalmente”, añadieron.

“Este ha sido últimamente el lugar de reunión habitual de los corresponsales internacionales y de la sociedad en Kramatorsk», sostuvieron los tres periodistas quienes aún no salen de su asombro dada la terrible experiencia.

“No nos sorprendió mucho porque aquí todos los días se oyen explosiones en varios lugares puesto que estábamos en un país en plena guerra”, expresaron felices de haber salido con vida de dicha explosión.

Tras la explosión Sergio Jaramillo, Héctor Abad, Vitoria Amelina y Catalina Gómez se fueron para una la estación de gasolina de Kostiantynovka (Donbas), con el fin de ir luego en carro hasta un centro médico.

 “Tenemos muchas esquiarlas de misil en nuestros cuerpos. Pero, en el fondo no es nada grave, pese a la dura explosión que sacudió el lugar y lo dejó en ruinas”, comentaron los tres periodistas.

Pero lo que los periodistas no supieron es que esta explosión dejó cuatro civiles muertos y decenas de heridos ya que sobre varios de ellos cayeron columnas y paredes de comercios.

Se sabe oficialmente que Sergio Jaramillo, Héctor Abad Faciolince y Catalina Gómez, están   bien y solo sufrieron heridas leves. Pero Victoria Amelina, otra amiga, se encuentra en estado crítico por una lesión en el cráneo, causada probablemente por los vidrios y vigas que volaron».

Catalina Gómez Ángel es periodista especializada en Oriente Medio desde hace una década. Ha trabajado en Irak —donde pasa últimamente la mayor parte del tiempo—, Siria, Líbano, Egipto, Afganistán, Turquía, Gaza, Nepal, México y Colombia. 

Después de vivir por algunos años medio camino entre Teherán y Beirut, terminó por radicarse en Irán en 2011.

Actualmente, pasa gran parte de su tiempo en Ucrania, cubriendo el conflicto tras la invasión rusa a ese país desde febrero de 2022. Gómez Ángel fue periodista de la Casa Editorial EL TIEMPO, y actualmente es colaboradora frecuente de la revista Bocas y escribe para el diario español La Vanguardia, así como para France 24 y Radio Francia Internacional.

Minutos antes de la explosión, Sergio Jaramillo, Héctor Abad, Vitoria Amelina y Catalina Gómez lograron tomarse algunas fotografías en una estación de gasolina de Kostiantynovka (Donbas), lugar en donde la artillería rusa ha estado disparando en las últimas horas tras la visita de Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania.

«Estimados amigos de ¡Aguanta Ucrania!, los que puedan recen por Victoria Amelina. Nosotros estamos bien», dijo Sergio Jaramillo tras al ataque. Seguiremos en nuestra lucha”.

“Cuando salimos de entre las ruinas con polvo por todo el cuerpo, fue que nos dimos cuenta de que estábamos heridos, por esquirlas de misil. Afortunadamente no fueron muy graves. Pero quedamos con la sensación de la muerte”, afirmaron.

“Es quizás la más dura experiencia vivida durante nuestra profesión. El impacto nos lanzó fuertemente contra unas ruinas de muros de cemento. Comenzamos a gritar y a llamarnos para saber que los tres estábamos vivos “, sintetizaron.

“Fue algo desgarrador. No pudimos auxiliar a nadie porque había mucha confusión en el lugar de la explosión. Solo veíamos ruinas. Y de pronto comenzó el fuego a aparecer. Fue un milagro salir vivos de allí”, concluyeron.

Temas similares…

Ser ‘Pesao’ es un crimen

Ser ‘Pesao’ es un crimen

Por Eladio Secades (1957) ¿Podría llegarse a la completa definición del “pesao”? Pensar que se es muy simpático es...

0 comentarios

Enviar un comentario