El senador republicano Marco Rubio advirtió durante una intervención en un foro en la ciudad de Doral que “solo una gran alianza de los países libres latinoamericanos evitará que en América Latina se sigan montando en el futuro tronos de dictadores comunistas”.
La advertencia de Rubio se hizo precisamente al aludir a todo el acontecimiento político que se está registrando ahora mismo en Colombia donde hay temor de que la izquierda y el comunismo bolivariano apoyen la subida al poder junto con el pueblo de esta nación al candidato Gustavo Petro.
“Ya estamos viendo que en Colombia se está presagiando un temor por lo que pueda suceder en el futuro político en este país teniendo en cuenta que el aspirante del Pacto Histórico Gustavo Petro es un consumado y gran aliado del dictador Nicolás Maduro”, insistió Rubio.
“Y no hay que ir muy lejos porque, además, todo el mundo sabe que Petro fue un antiguo militante del temible y peligroso movimiento guerrillero M19 que mató a civiles y a un estadounidense provocando también el incendio al Palacio de Justicia donde murieron más de una veintena de magistrados”, dijo.
“ Y también existe el temor de que Rusia también pueda estar involucrada en esto ya que se sabe que la inteligencia de ese país, apoltronada en la embajada soviética en Bogotá, ha hecho trabajos de inteligencia, porque le beneficia que haya otro país como Colombia leal a sus intereses políticos”, afirmó.
“Lo que sí puedo afirmar con seguridad, es que Venezuela, Nicaragua y Cuba, van a ser todo lo posible para crear, no solo a través de las redes sino de otros medios de comunicación, el caos político para que se desestabilice la democracia en Colombia porque a ellos les conviene” con el fin de conseguir en estos dictadores otro aliado para la causa bolivariana y del comunismo en América Latina, insistió Rubio.
“Y también puedo afirmar con seguridad que hubo movimientos, quizás agitados por esos países, que intervinieron en los disturbios que hubo en Bogotá, donde varios civiles y uniformados resultaron gravemente heridos, ya que las autoridades denunciaron la infiltración de células extranjeras”, sostuvo.
“Lo tengo que decir con toda confianza que debemos colaborar para que Colombia tenga unas elecciones dignas y limpias porque, ellos, sí están interesados en que Colombia haya un giro político sin antecedentes hacia la izquierda”, aseguró.
Rubio habló ante una veintena de exiliados venezolanos, quienes le pidieron su apoyo para que fortifique y extienda el TPS, luego de que también le solicitaron que haga votos ante el presidente Biden para que Venezuela sea incorporada a la lista de países que apoyan al terrorismo mundial.
Rubio puso como ejemplo el caso de Colombia, que después de que en este país se delató un escándalo, en el que se confirmó frecuentes reuniones de un alto oficial del comando de las Fuerzas Militares colombianas con un par de ciudadanos rusos, y un inusual incremento de su patrimonio, que dieron origen a una investigación transnacional activa en la que intervienen la CIA, la DEA y agentes de inteligencia británicos y colombianos.
El oficial—de acuerdo a datos obtenidos – fue retirado luego de haberse descubierto que estaba averiguando datos sobre el manejo y destino de los gastos reservados de seguridad nacional. Pero el caso no se cerró con su salida de la institución.
Sus interlocutores –de acuerdos con esas fuentes– empezaron a ser monitoreados y ahora autoridades en Estados Unidos creen tener en sus manos uno de los procesos de blanqueo de capitales más sofisticados, que incluye giros desde Moscú a Bogotá y Medellín y retiros de cajeros en pesos y criptomonedas.
Pero en Colombia están seguros de que detrás del envío de dinero desde el Sberbank, el mayor banco de Rusia y de Europa oriental, hay un operativo que busca desestabilizar la democracia y el orden público en el país.
Tras infiltrar a oficiales de inteligencia, se recogió evidencia de la inyección de capital a grupos que están detrás de los desmanes y destrozos en las protestas de los últimos meses, e incluso en 2019.
El otro está liderado por alias Servac, que se mueve por Colombia con una certificación consular rusa de que no tiene antecedentes penales. Y según su currículum es abogado y trabaja en actividades turísticas. Además, pone como referencia personal a un supuesto miembro de la diplomacia rusa.
Oficiales de inteligencia de diferentes agencias le han hecho seguimientos a ‘Servac’ –el espía ruso–e incluso lograron intervenir su teléfono celular.
En una de sus conversaciones, traducida por peritos de Estados Unidos, se le escucha desde coordinar giros desde Moscú a Colombia a través del Sberbank y de la agencia Western Unión hasta decir que está buscando amigos poderosos en el país.
Hay una en la que se escucha una coordinación de giros desde Moscú a Colombia a través del Sberbank y de la agencia Western Union. Pero en Colombia están seguros de que detrás del envío de dinero desde el Sberbank, el mayor banco de Rusia y de Europa oriental, hay un operativo que busca desestabilizar la democracia y el orden público en el país.
Tras infiltrar a oficiales de inteligencia, se recogió evidencia de la inyección de capital a grupos que están detrás de los desmanes y destrozos en las protestas de los últimos meses, e incluso en 2019.
Este reportero tuvo acceso al dosier que conoce el alto gobierno, y en este se asegura que hay dos grupos activos de ciudadanos rusos en Medellín y en Bogotá. El primero de ellos está articulado por una mujer que voló de Medellín a Panamá y de allí a Moscú en diciembre de 2021. El otro está liderado por alias Servac, que se mueve por Colombia con una certificación consular rusa de que no tiene antecedentes penales.
La subsecretaria de Estado para Asuntos Políticos, Victoria Nuland, dijo que le preocupaba la presencia de los rusos en regiones fronterizas y que se trataba de un país con experiencia en interferir en la política de otras naciones.
La funcionaria agregó que se trabajaba de la mano con Colombia para impedir “que fuerzas externas malignas intervengan en las elecciones presidenciales del próximo 29 de mayo, La contienda para la presidencia de Colombia será entre Gustavo Petro y Fico Gutiérrez.
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