En las largas noches de Adviento;
tiempo de cristiana espera y reflexión,
me traslado hasta Pinar del Río
en mi nostálgica navideña imaginación.
Por mis pinareñas calles
voy al encuentro de mi casa familiar.
Me pierdo.., no doy con mi barrio
y a ningún vecino logro encontrar.
Antes de despertar a la realidad,
en mi fugaz imaginación insisto,
en hacer el icono pascual
para el Niño que será el Cristo.
En una hermosa jaula abandonada,
que entre muros de agua y tiempo flota,
hago un despoblado «Belén «;
no hay materiales para otra cosa.
( Ni madera ni clavos,
ni cal para pintar;
para el pueblo
tampoco hay en esta Navidad).
La Naturaleza suple las carencias,
su acuarela abunda el paisaje de color;
celeste velo bordado en lágrimas de estrellas,
verde alfombra incrustada en piedras de dolor.
( Para el Niño una cunita,
para María un sillón,
para José un taburete,
para el cubano: ni un cajón).
Al pie de una montañita sin cafetos,
la palma real, la ceiba y el jagüey
se disputan dirigir al sinsonte;
polifónica ave canora del batey.
(No están la vaca,
la mula ni el buey;
el pueblo sin otro remedio,
se los comieron ayer).
Un bohío, cobijado de pencas históricas
y yaguas de cuatro décadas de lucha,
animado por el desarmónico canto de ranas
y de la corriente de un río sin trucha.
(No hay jabón,
panales ni camiseta;
Jesús Niño
no está inscrito en la «libreta» ).
Los guiños de la lumbre celestial
dibuja endijas, puerta y ventana
que se reflejan en piso de tierra apisonada,
alfombra para los pies de la pareja santa.
(No habrá lechón,
vino ni buñuelos
para los cubanos
sin dólares ni euros ).
Una cortina musical instrumenta
los alegres villancicos de siempre
“Arbolito arbolito… Noche de Paz…
Cascabel,Cascabel…,Feliz Navidad…”
( Este año,
ni juguetes ni regalos;
ni lápiz y papel
para escribir a los Magos ).
Al Punto cubano pregunta el alegre son:
» Cuándo volverá la Noche Buena.. “
y el discreto bolero le ruega:
» No me vayas a engañar…. «.
Una guaracha del exilio le da aliento:
» Ya viene llegando…. «.
Pero el pueblo sigue en su Adviento….
Ah.., la estrella…la estrella…
Yo no la sitúo…,sólo puede hacerlo el Cielo
y Jesús brillar su Paz.; de Libertad y Justicia,
que le pido, llegue hasta mi, mi cubano suelo!
Elisa N. Fernández Torres
0 comentarios