Durante su velación en una funeraria de la Pequeña Habana, el domingo pasado, allí solo se escucharon comentarios y anécdotas de la lucha que libró el patriota Roberto Martin Pérez, esposo de la periodista Ninoska Pérez Castellón, en tratar de ver a una Cuba libre y soberana sin comunismo ni dictadores.

Hasta allí, además, llegaron algunos líderes del exilio cubano en Miami, para rendirle y darle su último adiós a este gran insigne personaje, que supo ganare el aprecio del pueblo libre de Cuba, además de los caudillos que, junto con él, se sumaron a tenaces luchas por la libertad en la isla.

“Murió en paz, y sé que está junto a ese Dios, que nunca lo abandonó en los momentos más difíciles y en el que creía sobre todas las cosas”, expresó Ninoska, quien recibió el sentido pésame de los asistentes al velorio el pasado domingo.

Luis Zúñiga, quien compartió luchas con Martín Pérez, lo describió como un hombre íntegro y convencido totalmente de su s ideas y, más aún, las que tuvieron que ver con la libertad de Cuba, lo cual le costó estar en prisión por muchos años.

Letgardo, su hermano, siempre vivió orgulloso del heroísmo de Martín, ya que éste nunca abandonó sus batallas e, inclusive, en el exilio compartió muchas con líderes de las distintas organizaciones cubanas que aún operan en Miami.