Buenos Aires, 16 abr (EFE).- La provincia argentina de Neuquén vivió este domingo una sorpresa al terminar con 61 años de gobierno del Movimiento Popular Neuquino (MPN), mientras que Río Negro reafirmó el dominio de Juntos Somos Río Negro (JSRN), durante el inicio del calendario electoral del país suramericano.
En Neuquén, el nuevo gobernador será el candidato opositor del partido Comunidad, Rolando Figueroa, con el 35,64 % de los votos, que se impuso al oficialista del MPN y actual vicegobernador, Marcos Koopman, con un 33,14 %.
Con el 99,28 % de las mesas escrutadas, Figueroa finalizó la hegemonía del movimiento popular, que desde 1962 ha mantenido su poder en la política neuquina, ganando cada elección.
El hombre del momento, hasta noviembre pasado, integraba las filas del MPN y fue elegido diputado nacional gracias a esa misma fuerza, inclusive fue el vice del actual gobernador, Omar Gutiérrez, entre 2015 y 2019, reelecto y que por ley no puede competir para un tercer mandato.
Figueroa formó un frente con peronistas que abandonaron al candidato del Frente de Todos, facción a la que pertenece el presidente argentino Alberto Fernández, y miembros de Propuesta Republicana (PRO) -fundado por el exmandatario Mauricio Macri (2015-2019)- que rompieron su alianza local con Juntos por el Cambio, para sumarse al partido Comunidad.
Detrás del gobernador electo y Koopman quedó el peronista Ramón Rioseco con el 12,71 %; el candidato del Partido Libertario, Carlos Eguía, con el 7,98 %; mientras que Juntos por el Cambio representado por Pablo Cervi consiguió el 3,75 % de los votos, seguido de cerca por Patricia Jure, del Frente de Izquierda Unidad con el 3,26 %.
Aunque Neuquén representa solo 1,5 % del padrón nacional, los ojos del presidente argentino probablemente estén puestos en Figueroa, ya que será parte de las decisiones que afecten la economía del país porque la provincia contiene la mayor parte de Vaca Muerta, la segunda reserva mundial de gas no convencional y la cuarta de petróleo de este tipo.
Un 76 % de los neuquinos participaron en el sufragio y, por primera vez, 546.166 electores argentinos y 7.128 extranjeros votaron bajo un sistema de voto electrónico, por el que, además de gobernador y vice, debieron elegir 35 diputados provinciales titulares y 18 suplentes, así como alcaldes y concejales municipales en 21 ciudades.
EL OFICIALISMO MANTIENE RÍO NEGRO
Por su parte, la provincia de Río Negro volvió a elegir a un candidato de la alianza JSRN, que gobierna desde 2015, cuando se fundó, e integra en sus filas políticos de distintas ideologías, una suerte de comodín que le permite diferenciarse entre peronistas y no peronistas.
Bajo el 86,96 % de las mesas escrutadas y con una participación que apenas llegó al 60 %, el líder del partido y senador nacional, Alberto Weretilneck, arrasó en los comicios al sacar el 39,24 % de los votos, algo más de 16 puntos sobre su principal rival, Aníbal Tortoriello, de Juntos por el Cambio (23,19 %).
Weretilneck gobernó desde 2012 Río Negro para el antiguo Frente para la Victoria (coalición del peronismo kirchnerista), tras el asesinato de Carlos Soria, entonces regidor, hasta 2019, cuando finalizó su segundo mandato, tras ser reelegido en 2015, ya con su formación actual.
Actualmente, gobierna Arabela Carreras, que descartó su reelección y pertenece al mismo equipo que Weretilneck.
En Río Negro hubo 1.785 mesas de votación para 589.251 personas habilitadas para elegir gobernador, vice y renovar 46 bancas de su Legislatura, así como 22 alcaldías municipales.
Ambas provincias eligieron desdoblar sus comicios de las nacionales, al igual que otras 17 jurisdicciones, que celebrarán primarias el 13 de agosto y generales el 22 de octubre de este año.