Montevideo, 30 jun (EFE).- El proyecto de ley de Rendición de Cuentas del Ejecutivo de Luis Lacalle Pou (centroderecha) llegó este miércoles al Parlamento uruguayo para su análisis y posterior aprobación con posibles cambios al Presupuesto aprobado en 2020 para los cinco años de mandato.
El proyecto de ley, en el que la coalición de Gobierno rinde cuentas de lo ejecutado y actuado en 2020, fue entregado por la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, a la vicepresidenta de la República y presidenta de la Asamblea General, Beatriz Argimón.
«Una parte importante de la Rendición tiene que ver con los gastos que se pusieron a disposición para atender cuestiones relacionadas a la pandemia del covid-19», declaró ante la prensa Arbeleche al término del encuentro.
La titular de la cartera económica defendió que el Ejecutivo no considera «aumento de ningún impuesto» a partir de 2022 durante la presentación de un presupuesto austero que, no obstante, incluye un aumento de 980 millones de dólares para el Fondo Coronavirus, creado por el Gobierno de Lacalle Pou para paliar la crisis sanitaria, económica y social provocada por la covid-19.
También figura la partida de 50 millones de dólares por año hasta el final del mandato (2020-2024) para un programa de ayuda a la primera infancia previsto desde 2022, como Arbeleche había anunciado el pasado 10 de junio.
El proyecto de ley de Rendición de Cuentas, que incluye unos 300 artículos, ingresará primero a la Cámara de Representantes para su discusión y, una vez aprobado, pasará a la Cámara de Senadores para la sanción definitiva.
Lacalle Pou declaró a principios de junio en una entrevista televisiva que el proyecto enviado por el Ejecutivo procuraría el «gasto cero» con la salvedad de «algunos incrementos puntuales», pero posteriormente el equipo económico ratificó los mencionados aumentos.
Por otro lado, según consignó el diario local El País, la titular de Economía y Finanzas espera que el proyecto tenga «pocas modificaciones» en el Parlamento, pero es consciente de que habrá «presiones» tanto desde los sindicatos como desde Cabildo Abierto, uno de los socios de la coalición de Gobierno, que, no obstante, ha expresado algunas discordancias con el resto del Ejecutivo.