Tegucigalpa, 31 mar (EFE).- Una jueza nicaragüense declaró no culpable de un delito contra la seguridad pública al militar retirado opositor Rodrigo José Navarrete Vanegas, considerado preso político por los organismos humanitarios y quien estaba detenido desde noviembre pasado, informaron este viernes fuentes judiciales.
La jueza Roxana Martínez, titular del Juzgado Octavo Local Penal de Managua, expuso en su sentencia que el Ministerio Público «no logró desvirtuar el principio de inocencia» de Navarrete, a quien se le acusó por su presunta participación en el delito de portación o tenencia ilegal de armas de fuego o municiones en perjuicio de la seguridad pública de la sociedad nicaragüense.
En su fallo, dictado el pasado lunes y divulgado este viernes en el sistema electrónico del Poder Judicial, la jueza explicó que otorgó la duda razonable al acusado, de conformidad con el artículo 2 del Código Procesal Penal, y ordenó su liberación, la que se hizo efectiva el jueves.
El artículo 2 del Código Penal establece que toda persona a la que se impute un delito se debe de presumir su inocencia «y como tal deberá ser tratada en todo momento del proceso, mientras no se declare su culpabilidad mediante sentencia firme dictada conforme la ley».
Además, señala que hasta la declaratoria de culpabilidad, ningún funcionario o empleado público «podrá presentar a una persona como culpable ni brindar información sobre ella en ese sentido».
«Cuando exista duda razonable sobre la culpabilidad del acusado, al dictarse sentencia o veredicto, procederá a su absolución», dicta el Código Procesal Penal.
Navarrete, de 59 años, era uno de los 37 opositores privados de libertad, considerados presos políticos por los organismos humanitarios.
El militar en retiro y disidente sandinista es tío del también opositor y encarcelado Jaime Navarrete.
El ahora liberado cuenta con medidas cautelares otorgada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde diciembre de 2022.
Ese organismo determinó que Navarrete, que fue detenido en su casa en un operativo policial realizado la madrugada del 25 de noviembre pasado, según testigos, se encontraba en una situación de «gravedad y urgencia de riesgo de daño irreparable a sus derechos en Nicaragua».
Según el Mecanismo Para el Reconocimiento de Personas Presas Política, las autoridades nicaragüenses mantienen en prisión al menos a 36 opositores o críticos del Gobierno de Daniel Ortega, incluido el obispo nicaragüense, Rolando José Álvarez Lagos.
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión o en el exilio.